El intendente de Puerto Madryn Gustavo Sastre logró aprobar en abril pasado una ordenanza con la que permite cobrarle impuestos municipales a los parques eólicos de la zona. La iniciativa no era menor desde el punto de vista recaudatorio: en la ciudad patagónica está ubicado el Parque Éolico Chubut Norte I, considerado como el más grande del país y con una capacidad para proveer energía limpia a 330 mil hogares.
Por entonces, la ordenanza n°11.349 sancionada al comienzo del aislamiento preventivo y obligatorio provocó un duro rechazo de la Cámara Argentina de Energías Renovables (CADER), al considerar que la “tasa de servicio a las energías renovables» implica un tributo “gravoso” y “arbitrario” para el desarrollo de la actividad.
Por la ampliación del ejido urbano de Puerto Madryn, los proyectos eólicos quedaron bajo el alcance municipal. Aunque las energías renovables están exentos de algunos impuestos, el Concejo resolvió aplicar una «tasa por habilitación, inspección, seguridad e higiene y control ambiental” por los metros cuadrados de uso, con un tributo que se le suele aplicar a toda empresa.
A pesar de las críticas empresarias, el municipio a cargo del intendente Gustavo Sastre dio un paso adelante esta semana y estableció una modificación tarifaria en aquella tasa. Ahora, en vez de pagar una suma por los metros cuadrados, los parques eólicos deberán abonar en función de lo que producen; es decir, una suerte de “impuesto al viento”.
Fuente: Infobae