Los abogados que representan a la familia de Fernando Báez Sosa, el joven de 19 años que fue asesinado a golpes el 18 de enero pasado en Villa Gesell, pidieron que nueve de los rugbiersvayan a juicio por el crimen. Para uno de ellos, la fiscal del caso había solicitado el sobreseimiento, y los abogados pidieron que sea juzgado junto a los otros ocho acusados por su muerte.
Según consignó Télam con información de fuentes judiciales, Fernando Burlando y Fabián Améndola, abogados de la querella, solicitaron a David Mancinelli, juez de Garantías de la localidad balnearia que Alejo Milanesi, de 19 años, también vaya a juicio oral por el crimen.
Actualmente el joven se encuentra en libertad y es uno de los dos imputados para los que la fiscal de la causa, Verónica Zamboni, había pedido el sobreseimiento al requerir la elevación a juicio. Milanesi está acusado como partícipe necesario, al igual que Juan Pedro Guarino (19), y la fiscal había pedido el sobreseimiento de ambos.
Los abogados de la familia de Fernando, mediante una presentación en el Juzgado, compartieron lo expuesto por Zamboni, titular de la Unidad Funcional de Instrucción 6, pero consideraron que en el caso de Milanesi el pedido de sobreseimiento es «prematuro», y que no se puede «descartar la participación» en el crimen ocurrido esa madrugada frente al boliche Le Brique.
«Si bien no hay videos en los que se lo muestre pegándole a Fernando, ello no demuestra con el grado de certeza requerido para un sobreseimiento que no participó en un principio de la golpiza o inclusive del plan para darle muerte», indicaron los letrados.
Apuntaron a que, si bien esa circunstancia fue la que generó que no se su prisión preventiva, “de ninguna forma alcanza para beneficiarlo con una medida de carácter definitivo». En ese marco, consideraron que la situación de Milanesi «corresponde sea evaluada con la amplitud del debate oral», junto a la de los ocho rugbiers que cumplen prisión preventiva en la Alcaidía 3 del penal de Melchor Romero, en La Plata, imputados como coautores del delito de «homicidio doblemente agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas».
Se trata de Máximo Thomsen (20), Ciro Pertossi (20), Luciano Pertossi (19), Lucas Pertossi (21), Enzo Comelli (20), Matías Benicelli (21), Blas Cinalli (19) y Ayrton Viollaz (21).
Por otro lado, los abogados de los padres de Fernando señalaron además que se debe seguir investigando la posible intervención del denominado «sospechoso número 11», identificado en el expediente como Tomás Colazzo. Pidieron que el joven, quien no fue imputado por la fiscal, sea indagado antes de que se resuelva la elevación a juicio.
La noche del crimen
Los abogados consideraron probado durante la instrucción que «entre las 4.41 y las 5» del 18 de enero, Fernando fue asesinado a golpes frente al boliche ubicado en Avenida 3 y Paseo 102, en línea con lo que estableció la fiscal.
Los rugbiers que aún están detenidos, detallaron, «acordaron darle muerte» al joven estudiante de derecho, «para lo cual previamente, distribuyeron funcionalmente sus roles luego de que minutos antes, al encontrarse en el interior de Le Brique tuvieran un altercado» con Fernando, quien se encontraba acompañado con su grupo de amigos.
Luego de que personal de seguridad del local expulsara a ambos grupos del lugar, los acusados «abordan por detrás a Fernando, aprovechándose de que estaba de espaldas e indefenso, y de ésta manera, actuando sobre seguro en virtud de la superioridad numérica y física, lo rodean, se abalanzan sobre él y comienzan a propinarle golpes de puño en su rostro y cuerpo».
Al quedar Báez Sosa inconsciente, «con el fin de darle muerte y cumplir con el plan acordado, le propinaron allí en el suelo, varias patadas en su rostro y cabeza, causándole lesiones corporales internas y externas, las cuales provocaron su deceso en forma casi inmediata, al causarle un paro cardíaco producido por shock neurogénico debido a un traumatismo grave de cráneo».
Asimismo, detallaron que agredieron a los amigos de Fernando, «posibilitando fundamentalmente la comisión del hecho e impidiendo de ésa forma que pudiese defenderse por sí solo e incluso recibir defensa» de ellos.
Fuente: Perfil