El delantero argentino Paulo Dybala y dos jugadores más de la Juventus, el estadounidense Weston McKennie y el brasileño Arthur, fueron desafectados este sábado por el entrenador del equipo, Andrea Pirlo, antes del clásico de Turín por la fecha 29 de la Serie A de Italia, por haber participado de una fiesta que violó las restricciones sanitarias dispuestas frente a la pandemia de coronavirus.
«Los tres jugadores involucrados en lo ocurrido la noche del martes pasado fueron desafectados del equipo y no tomarán parte del partido ante Torino. Van a retomar el trabajo con el tiempo, veremos cuando» explicó Pirlo sobre la decisión que tomó, según publicó el periódico italiano Gazzetta dello Sport.
«Tenemos que actuar como ejemplo, hicieron algo en el momento equivocado, por lo que está pasando en el mundo y no solo por el equipo», añadió Pirlo, muy disgustado por la situación.
El cordobés Dybala y Arthur concurrieron a la casa de McKennie en donde se organizó la fiesta que violó el toque de queda y los protocolos sanitarios vigentes en Italia para mitigar los efectos de la pandemia.
Dybala, McKennie y Arthur están en serios problemas, ya que fueron sorprendidos el martes último por la policía durante una fiesta con al menos 10 personas en la casa del estadounidense alrededor de las 23.30, más allá del horario de las 20 que indica el toque de queda.
La policía italiana intervino por una denuncia de algunos de los vecinos de McKennie y en esa reunión realizada en la casa de las colinas de Turín, estuvieron Dybala y Arthur con sus parejas y otros amigos.
El argentino estaba en condiciones de volver a jugar ante Torino luego de más de dos meses sin actividad a causa de una lesión que lo alejó de las canchas, a lo que se suma que también hace algunos meses dio positivo de Covid-19.