El representante permanente alterno de Argentina ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), Fabián Oddone, expresó hoy en la 58ª sesión plenaria de ese organismo la «preocupación» del país a partir del apoyo de Rusia a dos provincias separatistas de Ucrania.
«Nos alarma la crisis actual, así como la posibilidad de que esta se siga agravando. Es necesario dar pasos sustantivos para entablar un diálogo constructivo y de buena fe a fin de encontrar una salida pacífica y concertada», planteó Oddone.
Asimismo, resaltó en su discurso que «resulta esencial que todos los países nos apeguemos a los principios a los que hemos adherido como miembros de estas Naciones Unidas. En tal sentido, se deben redoblar los esfuerzos de acercamiento diplomáticos para aliviar tensiones y, al mismo tiempo, fortalecer el espacio de diálogo. No existe una solución militar en este asunto, por el contrario, debe primar la diplomacia preventiva y el diálogo como vía de distensión», añadió.
«La Argentina reitera su firme compromiso con el principio de la solución pacífica de las controversias internacionales y sostiene que solo por esta vía se aseguran soluciones justas y duraderas», indicó, consignó la Cancillería en un comunicado.
Y remarcó: «En este marco se apela a todas las partes involucradas a resolver sus diferencias a través del diálogo, con apego a los principios consagrados en la Carta de las Naciones Unidas y el derecho internacional, como el respeto a la soberanía de los Estados, el no uso de la fuerza y el pleno respeto de los derechos humanos. Nos sumamos al llamado del secretario general, António Guterres, a todos de abstenernos de ‘acciones y declaraciones que lleven a esta peligrosa situación a estar fuera de control’».
Finalmente, sostuvo que «Argentina no cree en un camino de confrontación que nos remita a la lógica del pasado en un mundo dividido tajantemente entre el este y el oeste. Tales dicotomías están hoy perimidas. A todos nos compete abstenernos de alentar disensos y escalar en confrontaciones que quiebren la paz y la seguridad internacionales».
Oddone afirmó que «la comunidad internacional debe contribuir activamente para generar un clima propicio para la negociación internacional y lograr que las partes entablen un diálogo constructivo que les permita encontrar una salida pacífica a la situación».
En esa sesión, Guterres expresó que el mundo se enfrenta a «un momento de peligro» por la crisis en Ucrania y cuestionó la decisión rusa de reconocer la independencia de dos provincias separatistas en el este de ese país, que tachó de «violación de la integridad territorial» de la exrepública soviética.
El secretario general enfatizó que la decisión rusa de reconocer la independencia de las repúblicas populares separatistas de Donetsk y Lugansk constituye una «violación de la integridad territorial» de Ucrania e instó a un inmediato cese de hostilidades en el este de ese país.
Denunció además que esa medida «unilateral entra en conflicto directamente con los principios de la Carta de las Naciones Unidas, y es inconsistente con la llamada Declaración de Relaciones Amistosas de la Asamblea General que la Corte Internacional de Justicia ha citado repetidamente como representación del derecho internacional».
Por su parte, el canciller ucraniano, Dmytro Kuleba, señaló que su país no es una amenaza para Rusia porque «nunca ha planeado ninguna operación militar en Donbass», al responder a denuncias del Kremlin sobre acciones militares de Kiev en esa región del este en la cual se ubican estos enclaves separatistas prorrusos.