El Gobierno de Argentina concretó este martes la ampliación de un swap con China por un monto equivalente a 5.000 millones de dólares, que servirán para robustecer las reservas del Banco Central y serán de «libre disponibilidad».
El anuncio fue hecho por el presidente argentino, Alberto Fernández, en declaraciones al término de una reunión con su homologo chino, Xi Jinping, en Bali, Indonesia, donde ambos mandatarios asisten a 17.ª Cumbre de Líderes del G20.
«Hoy lo que nos informó el presidente Xi es que el Gobierno chino había autorizado que Argentina disponga libremente de 35.000 millones de yuanes, lo que significan 5.000 millones de dólares. Para nosotros, esa es una gran noticia, lo agradecimos profundamente», indicó Fernández, acompañado por el canciller, Santiago Cafiero, y el ministro de Economía, Sergio Massa.
El mandatario argentino recordó que las negociaciones para la ampliación del swap llevan varios meses, pero que la respuesta llegó finalmente este martes. «Para nosotros esa es un gran noticia que agradecimos profundamente. Además, me explicó [el presidente Xi] que es una excepción absoluta que hace China para con la Argentina y así lo tomamos y así lo agradecemos», aseveró Fernández.
El ministro Massa, por su parte, precisó que los recursos serán destinados a las reservas del Banco Central (BCRA) para darle mayor fortaleza a la moneda local y aumentar «la capacidad de acción en el mercado único libre de cambios del Banco», refiere un comunicado de Casa Rosada.
Qué es y cómo funciona el swap
El swap (intercambio, por su traducción en castellano) es una préstamo contra una garantía en títulos públicos, que se desembolsa en bancos internacionales. Mediante este mecanismo, dos partes se comprometen a canjear un monto de dinero en sus monedas respectivas, por un plazo determinado.
En este caso, el BCRA y el Banco Popular de China (BPC) canjean pesos argentinos por yuanes. En enero de este año, trascendió que Buenos Aires pretendía ampliar el swap que está vigente con Pekín desde 2009, y que asciende a unos 20.000 millones de dólares.
En la comparecencia de hoy ante los medios, Massa insistió en que la reunión de este martes fue «muy importante» porque permitió poner sobre la mesa «la necesidad de restablecer el equilibrio» en el comercio bilateral. «La relación con China –agregó el ministro– es deficitaria para la Argentina y, de alguna manera, lastima la proyección de reservas».