En su primera entrevista como presidente electo, Javier Milei confirmó que inició gestiones para sumar respaldo de un sector del peronismo que le permita alcanzar el cuórum en el Congreso, donde su acuerdo con el PRO y el posible acercamiento con los partidos provinciales le es insuficiente para sesionar, al menos mientras se resistan a ayudarlo la UCR y la Coalición Cívica.
Después del triunfo de La Libertad Avanza en las primarias, el equipo político de Milei decidió que lo mejor era ceder la presidencia de la Cámara baja a alguien representativo de los aliados. El primer elegido era Florencio Randazzo, como anticipó Letra P, pero el exministro prefiere un lugar en el Ejecutivo. El mandatario electo agregó este lunes otro nombre: Miguel Ángel Pichetto, diputado electo desde el 10 de diciembre. «Podría desempeñar un rol importante», anunció. En el Senado, aspira a ocupar un lugar similar el salteño Juan Carlos Romero.
Pichetto es uno de los 54 miembros del frente PRO que se negó a apoyar a Milei luego del 22 de octubre. Confirmaron un respaldo 40 integrantes, encabezados por el jefe de bancada, Cristian Ritondo, uno de los referentes del contingente macrista que este domingo fue al Hotel Libertador a celebrar la victoria de Milei.
Si el economista lo decide, Ritondo está dispuesto a ser el presidente de la Cámara baja, aunque en ese caso no será un tema fácil definir su sucesor como jefe del bloque PRO. Pichetto es cercano a Mauricio Macri -confidente de Milei para estos asuntos- y puede ayudar a construir consensos con los gobernadores. Además, el peronista tiene una vieja amistad con Guillermo Francos, que será ministro del Interior desde el 10 de diciembre.
Durante los cuatro años en que fue presidente, Macri se benefició del oficio del rionegrino en el Senado. Si bien se distanciaron por la interna del PRO -Pichetto jugó con Horacio Rodríguez Larreta-, nunca rompieron relaciones.
LLA tendrá 38 miembros y una discusión de estos días es si confluyen en un interbloque con el PRO, con un presidente por bancada y un coordinador de ambas. La idea está en estudio.
La fuerza libertaria tendrá dos nuevos integrantes. Nicolás Ema, que reemplazará a Milei; y María Fernanda Araujo, quien sustituirá a la vicepresidenta electa, Victoria Villarruel. Ema es el líder del Partido Libertario de la Ciudad, mano derecha del economista en el Congreso, donde ejerce como secretario parlamentario. Araujo es hermana de un combatiente de Malvinas de Entre Ríos y se hizo lugar en la lista por la gestión de Juan José Gómez Centurión.
Carolina Piparo, confirmada para asumir en Anses, será sustituida por Karina García, una dirigente que asumió en 2021 en la lista de José Luis Espert. Se estima que se hará libertaria, pero aún debe confirmarlo. De lo contrario, LLA tendría un voto menos.
El jefe de la bancada de Milei sería Oscar Zago, cercano al legislador porteño Ramiro Marra. Aunque también se anotan figuras cercanas a Milei, como la marplatense Juliana Santillán, presente en todos los actos del presidente electo.
En cualquier caso, para llegar a los 129 votos necesarios para abrir el recinto, el nuevo Gobierno necesita más aliados. No le alcanza con los partidos locales, que alcanzan 16 votos. Pichetto y Ritondo serían los encargados de conseguirlos. El rionegrino aún debe confirmarlo.
Factor Romero
En el Senado, La Libertad Avanza tiene siete bancas y Macri sólo pudo acercar cinco más, un número exiguo: para abrir el recinto hacen falta 37. Sólo dos menos se había asegurado Massa para el bloque Unión por la Patria y confiaba en llegar al cuórum con la paleta de partidos provinciales, que tiene cinco representantes, dos de Misiones, dos de Santa Cruz, uno de Río Negro y uno de Neuquén.
La victoria de Milei cambió el escenario y las 12 bancas del mileimacrismo deberán buscar aliados para tener alguna chance de abrir el recinto. No está nada fácil, porque si los 13 representantes de la UCR se resisten a acompañar, Milei necesita sumar alguna parte del peronismo.
El único aliado del libertario con ese ADN de origen en la Cámara alta es Romero, quien siempre mantuvo una buena relación con Macri. Según confiaron a Letra P desde su entorno, en estos meses tuvo dialogó con Villarruel, que será presidenta del Senado desde el 10 de diciembre. Prometió buscar puentes con referentes de gobernadores peronistas, quienes antes deberían romper filas con el kirchnerismo. Será la discusión de los próximos días y de los años por venir.