La nena tenía 11 años cuando era sometida por su padrastro al momento en que se quedaban solos porque la madre de la víctima se iba a trabajar. “Vení monita, haceme mimos”, le decía y la sentaba sobre su falda para tocarle sus partes intimidas y luego acostarse sobre ella, según se detalla en la acusación fiscal que terminó en condena tras un juicio abreviado en el que el imputado aceptó su responsabilidad a cambio de que le bajaran la pena.
El cargo por el que al policía terminaron sentenciándolo a tres años de cárcel con condena de cumplimiento condicional es; “abuso sexual simple agravado por la situación de convivencia preexistente, en la modalidad de delito continuado en carácter de autor”.
Los hechos, según la Justicia, ocurrieron a partir de febrero de 2018 en las Mil Viviendas de Trelew; en el departamento en el que el condenado convivía con su pareja y la hija de esta, que en la actualidad tiene casi 18 años.
El juicio abreviado se llevó a cabo hasta hace unos días, fue presidido por la jueza Mirta del Valle Moreno, se concretó a puertas cerradas, y el policía condenado –que debería ser echado de la fuerza, deberá atenerse a cumplir en los próximos cuatro años determinadas imposiciones que le ha fijado la magistrada, tales como; someterse a un tratamiento psicológico, no consumir estupefacientes, ni abusar de bebidas alcohólicas y no tener ningún tipo de contacto con la víctima.