La agenda política con foco en Vaca Muerta muestra esta semana tres emergentes principales: la confirmación de fondos para infraestructura que empieza a dar a conocer el gobierno neuquino; el MPN y la salida de cierto letargo con discusiones que miran hacia las elecciones de medio término del año próximo; y una mini crisis de aprovisionamiento de GNC, con efectos locales y en decenas de estaciones de servicio en Argentina, foto paradójica que por contraste vuelve a poner en escena el tipo de celeridad con la que se necesitan las obras de infraestructura para transportar más gas del mundo shale.
Esta semana Neuquén recibió cierto alivio financiero. El gobernador Rolando Figueroa busca asegurar un plan de obras que tiene el antecedente de un acuerdo de gobernabilidad previo con intendentes, en medio de los cruces con Nación por la falta de aportes para infraestructura.
La CAF (Corporación Andina de Fomento) habilitó un crédito por 237 millones de dólares (u$s 100 millones para 2024). Y “Rolo” espera mostrar los primeros resultados en el interior provincial: una obra de asfalto para el corredor Aluminé-Villa Pehuenia, otro de esos puntos geográficos que requieren mejores rutas para impulsar un crecimiento adicional de la mano del turismo, segunda actividad económica de Neuquén, aunque con un potencial varias veces superior al de los desarrollos actuales.
Mientras busca afianzar el entendimiento con jefes comunales, en el juego de respaldos y diferencias con el gobierno nacional, la administración neuquina cuenta con un pretexto perfecto: cualquier tipo de acuerdo con el gobierno de Javier Milei tiene el límite de una gestión provincial sin legisladores nacionales de su propia extracción, si bien Figueroa trabaja en tándem con un par de ellos (en Diputados y el Senado), lo que le bastó para mostrar buena voluntad allí donde los temas del Congreso de la Nación le “cierran” a Neuquén.
En ese tránsito, el mandatario provincial muestra diferencias públicas sin tensar de más la cuerda en los temas que le hacen doler el bolsillo a su administración en pleno proceso de estanflación nacional.
Se empeña en preservar las condiciones para sostener la curva de crecimiento de la producción de crudo y gas que se encuentra en sus mejores valores históricos. En ese proceso de continuidad, las regalías, que ya implican la mitad de la recaudación provincial, generan algo de alivio ante el retroceso de aportes federales y los efectos locales de la recesión.
Es lo que en parte se plasmó en el capítulo energético de la Ley Bases en la Cámara Baja. Queda por ver la muñeca política del neuquino y sus pares de la Patagonia, que habían protagonizado una estruendosa posición cuando parecía aún más difícil relacionarse con el gobierno de LLA.
En medio de los cuestionamientos al Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI), posición que cuenta con adeptos en FECENE, la federación de empresas energéticas de Neuquén, que reclama para sí los mismos atributos que reserva el texto a los grandes capitales del exterior, el gobernador neuquino promete una versión local del régimen que se salte las limitaciones que eventualmente surjan del Congreso.
El MPN y el operativo clamor
Una convocatoria de un sector del MPN planteó un hecho que se destacó en la agenda política. Hugo Gutiérrez, ex intendente de Chos Malal, hizo una llamado a la militancia con el argumento de lanzar, según aclaró, una agrupación interna. El esquema que se desprende apunta al 2027 y ese sector partidario quiere protagonizar la construcción de un “frente” político que respalde la reelección de Figueroa, en cuyo entorno afirman que el mandatario pone más el foco en las elecciones de medio término del año próximo.
Pero contar esto es referirse solo a una parte de la historia. El llamado tuvo una reacción rápida.
La lista azul y blanca del MPN, del gremio petrolero, trató de plegarse a un llamado que entendió como una invitación a discutir sobre el futuro del partido neuquino, que viene de una derrota histórica, a manos de Figueroa, que en el 2023, entre cuestionamientos a Omar Gutiérrez y Jorge Sapag, actuales autoridades partidarias, decidió no ir a una interna y creó el frente Neuquinizate, con el que logró un triunfo histórico.
Antes, durante y después, cosechó contundentes adhesiones del partido provincial, sin las cuales no hubiera alcanzado la victoria, junto con los respaldos que obtuvo en todo el arco político.
Ante su aceptación del convite, los petroleros recibieron una aclaración pública: Gutiérrez, el ex intendente, sostuvo que sólo se trataba del lanzamiento de una agrupación interna, limitando el margen de participación.
Entre los azules y blancos creen que una definición de ese tenor tiene que incluir a todas las agrupaciones políticas, y critican que en vez de “ampliar” el espacio para el debate, el llamado acotado “termina dividiendo de nuevo” y “no es lo que necesita el partido provincial”.
Todo esto ocurre dentro del partido neuquino al mismo tiempo en el que están los que buscan dar el debate hacia el comicio de medio término del año próximo.
En paralelo a la convocatoria desde el norte provincial, en Rincón de los Sauces, Marcelo Rucci, el líder del gremio petrolero y referente de la lista azul y blanca, se reunió con legisladores provinciales del MPN en un acto en la seccional partidaria de la localidad petrolera. “Estamos para apoyar la iniciativa de la unidad de nuestro partido”, dijo Rucci en un video difundido por su equipo de comunicación.
El GNC y los cortes
El gobierno nacional se encontró de modo abrupto con una ola polar. Al menos, es el pretexto que dan por lo bajo en Energía y la cartera económica nacional al explicar la interrupción de contratos a pymes y expendedoras de GNC. En Neuquén, fueron unas seis estaciones de servicio afectadas y a nivel nacional por encima de 100.
El estado de situación impulsó a CECHA, la cámara de expendedores nacional, a solicitar una “solución inmediata” a través de un comunicado. Enarsa indaga el mercado para ver si es factible contratar de urgencia cargamentos de GNL, que le podrían salir más caros en función de la velocidad con la que sale a disputar ese aprovisionamiento. La demanda y oferta de gas, tensionada por la falta de pagos de Nación, ahora y en los meses previos, suma un variable, mala, con faltantes coyunturales. Otro de esos episodios que ponen en contexto la necesidad de acelerar en redes de transporte para afianzar la oferta interna, que sumó otro factor para la incertidumbre esta semana.