Los «músculos» se asemejan a pequeñas bolsas de congelación unidas a los huesos metálicos de la estructura, se contraen y relajan imitando el movimiento de un músculo.
Un equipo de investigadores suizos ha desarrollado la primera pierna robótica equipada con «músculos artificiales», una innovación que promete revolucionar el campo de la robótica. Estos músculos, que se asemejan a pequeñas bolsas de congelación, están diseñados para contraerse y relajarse, imitando el movimiento de los músculos humanos. La técnica fue detallada en un estudio publicado en la revista Nature Communications.
Los «músculos artificiales» están compuestos por bolsas rellenas de aceite y se integran en los huesos metálicos de la pierna robótica. Según Robert Katzschmann, coautor del estudio, el objetivo es crear robots humanoides que realicen «tareas domésticas aburridas», mejorando así la calidad de vida de las personas.
A diferencia de los robots industriales tradicionales, que suelen utilizar motores y articulaciones metálicas rígidas, la pierna robótica con músculos artificiales es más ligera y flexible. Esta técnica permite que el robot consuma menos energía al realizar movimientos, como al doblar la rodilla, y ofrece mayor agilidad en terrenos difíciles.
Actualmente, la pierna robótica puede saltar hasta 13 centímetros, lo que representa el 40% de su altura. Sin embargo, por ahora, los saltos se limitan a realizarse en círculo, ya que la pierna está conectada a un eje. Aunque aún no se ha logrado construir un robot humanoide completamente impulsado por músculos artificiales, Katzschmann sostiene que la producción en serie de estos músculos, gracias a su bajo costo, podría acelerar los futuros avances en robótica.
Fuente: www.dw.com.