El ejército israelí dijo el martes que hace semanas había matado a Hashem Safieddine, presunto sucesor del recientemente asesinado líder de Hizbulá, en un ataque aéreo cerca de Beirut, Líbano.
Se había especulado sobre la posible muerte de Safieddine desde que aviones de guerra israelíes lanzaron ataques contra una reunión de altos dirigentes de Hizbulá a principios de octubre. Fue uno de los bombardeos más intensos sobre la zona, un bastión de Hizbulá conocido como Dahiya, desde que el 27 de septiembre un ataque israelí mató a Hassan Nasrallah, quien fuera líder de Hizbulá durante muchos años.
Se asumía que Safieddine, primo de Nasrallah y uno de los principales dirigentes de Hizbulá, estaba en esa reunión.
El martes, el ejército israelí dijo que Safieddine murió en un ataque realizado unas tres semanas antes. Safieddine ejercía una influencia significativa sobre Hizbulá y actuaba como dirigente del grupo cuando Nasrallah no se encontraba en Líbano, según una declaración del ejército israelí.
“A lo largo de los años, Safieddine dirigió atentados terroristas contra el Estado de Israel y participó en los procesos centrales de toma de decisiones de Hizbulá”, decía el comunicado, y añadía que más de 25 agentes de Hizbulá estaban presentes en la reunión en la que los militares atacaron y mataron a Safieddine.
El ejército israelí no proporcionó ninguna prueba el martes para respaldar su afirmación de que Safieddine había muerto y, en las semanas transcurridas desde el ataque, Hizbulá había evitado hacer comentarios sobre lo que había pasado con él. El miércoles, Hizbulá confirmó que Safieddine había muerto.
“Hemos alcanzado a Nasrallah, a su sustituto y a la mayoría de los altos dirigentes de Hizbulá”, dijo en un comunicado el teniente general Herzi Halevi, jefe del Estado Mayor del ejército israelí. “Alcanzaremos a cualquiera que amenace la seguridad de los civiles del Estado de Israel”.
La muerte de Safieddine supondría otro golpe importante para Hizbulá, que muchos en Líbano consideran ahora sin dirección en medio de la campaña de asesinatos israelíes contra sus dirigentes.