Un violento temporal con ráfagas de hasta 100 km/h en São Paulo provocó graves daños en la planta de motores de Toyota en Porto Feliz, obligando a suspender su producción y generando un fuerte impacto en la industria automotriz regional.
El colapso del techo principal y de parte de la estructura metálica dejó inutilizada la fábrica de motores, lo que llevó a Toyota a frenar todas las operaciones en el complejo.
La interrupción afecta directamente a la planta de Sorocaba, donde se producen los modelos Yaris, Corolla y Corolla Cross. Sin el suministro de propulsores desde Porto Feliz, las líneas de montaje quedaron detenidas de manera indefinida.
En un comunicado, la compañía destacó: “La prioridad es la seguridad de los colaboradores y el relevamiento de los daños estructurales”.
Lanzamientos postergados en la región
El incidente también obligó a posponer el lanzamiento del nuevo Yaris Cross, previsto para octubre en Brasil y con llegada programada a la Argentina para el 27 de noviembre. La automotriz aún no confirmó una nueva fecha, lo que genera incertidumbre en el mercado.
Según Radio3, este estreno era uno de los más esperados del año en el sector automotor sudamericano.
Riesgo de faltantes en el mercado argentino
La suspensión de actividades en Brasil amenaza con provocar faltantes de unidades en la región, ya que ese país concentra la producción de Toyota para Sudamérica.
La filial argentina sigue de cerca la situación, consciente de que el abastecimiento local depende en gran medida de la importación de esos modelos. Mientras tanto, la marca evalúa alternativas para recomponer su cadena de suministro y minimizar el impacto en los concesionarios.
Un golpe para la industria regional
El temporal no solo dejó daños materiales, sino que también puso en jaque la planificación comercial de Toyota en el continente. El retraso en lanzamientos y la posible escasez de modelos representan un desafío adicional para un mercado ya atravesado por tensiones económicas y logísticas.




