Zhi Dong Zhang, conocido en el submundo narcotraficante como «Brother Wang», ha sido capturado por las autoridades.
Al temido cerebro chino se le atribuye el movimiento de 1.800 kilos de fentanilo, más de 1.000 kilos de cocaína y más de 600 kilos de metanfetaminas a través de una red que conectaba China, México y Estados Unidos.
El Cerebro y Sus Múltiples Identidades
Según informes policiales internacionales a los que tuvo acceso este medio, Zhi Dong Zhang operaba bajo más de una veintena de apodos diseñados para evadir a la justicia. Mientras «Brother Wang» se volvió el nombre más mediático, en los círculos del narcotráfico también se lo conocía como «Pancho», «Ku Li Hernández», «El Chino», «Nelson Mandela», «Mr. T» y «BW2», entre otros alias. Este hombre de 38 años, originario de Pekín, se especializó en tejer la logística para transportar precursores químicos desde Asia hasta América.
La Magnitud de su Imperio Narco
Las investigaciones revelan la escala monumental de sus operaciones. Los informes oficiales le atribuyen el tráfico de 1.800 kilogramos de fentanilo, una droga sintética decenas de veces más potente que la heroína y responsable de miles de muertes por sobredosis en Norteamérica. A esta cifra se suman más de 1.000 kilogramos de cocaína y más de 600 kilogramos de metanfetaminas. Su rol era clave: actuaba como el eslabón conectivo entre los fabricantes en China y los cárteles mexicanos que distribuyen las drogas en Estados Unidos.
La Ruta del Fentanilo y su Segunda Captura
«Brother Wang» se había convertido en el puente fundamental entre las fábricas de precursores químicos en Asia y los laboratorios operados por cárteles en México. Su captura no es la primera, lo que evidencia la resiliencia de estas organizaciones transnacionales. La red que dirigía demostraba una sofisticación logística inusual, aprovechando rutas comerciales legítimas para camuflar el transporte de insumos para la fabricación de fentanilo, una crisis de salud pública que azota principalmente a Estados Unidos y Canadá.
La caída de «Brother Wang» representa un golpe significativo a una de las redes de narcotráfico más letales de la actualidad. Sin embargo, la estructura que ayudó a construir—y su segunda captura—subraya el desafío permanente que enfrentan las agencias antidrogas: desmantelar organizaciones fluidas, transnacionales y altamente adaptativas que prosperan en los eslabones más opacos del comercio global. Información extraída del medio El Mundo.