El presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva planteó una crítica directa a la estrategia antidrogas de Estados Unidos, sugiriendo que Washington debería «hacer algo juntos» con los países latinoamericanos en lugar de «invadir» y «combatir» en «territorio ajeno».
Las declaraciones se producen durante su gira por el Sudeste Asiático, en medio de la escalada militar estadounidense contra carteles en la región.
La Propuesta de Cooperación versus Intervención
Desde Yakarta, primera escala de su gira, Lula afirmó en declaraciones recogidas por medios internacionales: «Antes de juzgar a alguien, antes de castigar a alguien, hay que tener pruebas. No se puede simplemente decir que se va a invadir, que se va a combatir el narcotráfico en territorio ajeno, sin tener en cuenta la constitución de otros países, la autodeterminación de los pueblos, la soberanía territorial de cada país». El mandatario brasileño enfatizó que estaría dispuesto a discutir el tema con Donald Trump si se encuentran en Kuala Lumpur.
El Contexto de la Ofensiva Militar Estadounidense
Las declaraciones de Lula llegan en un momento de creciente tensión regional. Bajo el argumento de combatir el narcotráfico, Estados Unidos ha desplegado una ofensiva militar que incluye el hundimiento de al menos nueve embarcaciones en aguas del Caribe y el Pacífico, acciones que han sido denunciadas por los gobiernos de Venezuela y Colombia como «asesinatos y ejecuciones extrajudiciales». La estrategia de Trump ya se había manifestado meses atrás con la consideración de usar drones contra cárteles mexicanos.
La Respuesta a las Sugerencias Intervencionistas
Lula respondió indirectamente a las polémicas declaraciones del senador brasileño Flávio Bolsonaro, hijo del expresidente Jair Bolsonaro, quien había sugerido que Estados Unidos bombardee embarcaciones en Río de Janeiro. Frente a esta postura, el presidente brasileño defendió la cooperación: «Es mucho mejor que EE.UU. esté dispuesto a dialogar con la Policía de nuestros países, con las comunidades de Justicia de cada país, para que podamos hacer algo juntos».
El planteo de Lula marca una clara diferencia con la estrategia de mano dura promovida por Trump, reafirmando la postura de Brasil a favor de la soberanía nacional y la cooperación multilateral en la lucha contra el narcotráfico. Su mensaje subraya la necesidad de respetar las instituciones locales y construir soluciones conjuntas, en contraste con las operaciones militares unilaterales que han generado tensiones diplomáticas en toda la región. Información extraída del medio DW.




