El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció «tremendas» sanciones contra las dos mayores compañías petroleras de Rusia, Rosneft y Lukoil, en un intento por presionar a Moscú para que ponga fin a la guerra contra Ucrania.
Las medidas, que ya provocaron un alza del 5% en el precio del petróleo Brent, representan un giro significativo en la estrategia estadounidense.
El alcance de las sanciones económicas
Las sanciones impuestas por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro apuntan a corporaciones que representan casi la mitad de las exportaciones totales de crudo ruso. Rosneft -dirigida por Igor Sechin, aliado cercano de Putin- y Lukoil exportan en conjunto 3,1 millones de barriles de petróleo al día, representando Rosneft por sí sola el 6% de la producción mundial.
El contexto geopolítico de la medida
La decisión llega después de que Trump expresara creciente frustración con Moscú. «Cada vez que hablo con Vladimir, mantengo buenas conversaciones y luego no llegan a nada», explicó el presidente estadounidense. Scott Bessent, secretario del Tesoro, afirmó que «fue la negativa de Putin a poner fin a la guerra lo que finalmente motivó la medida», marcando un cambio tras meses de intentos de negociación que no arrojaron resultados tangibles.
Impacto global en la economía energética
Las sanciones ya generaron reacciones inmediatas en los mercados internacionales y entre los principales compradores del crudo ruso. China e India, que juntos representan la mayor parte de las exportaciones energéticas rusas, están revisando sus operaciones comerciales. Refinerías estatales indias examinan sus documentos para asegurarse de que ningún suministro provenga directamente de las empresas sancionadas, mientras Reliance, principal comprador indio, recalibra sus importaciones.
Expertos consultados por la BBC coinciden en que, aunque las sanciones perjudicarán la economía rusa -donde los impuestos del petróleo y gas representan un cuarto del presupuesto federal- es improbable que alteren inmediatamente el equilibrio militar en Ucrania. Sin embargo, a mediano plazo, Rusia enfrentará la disyuntiva de mantener su estabilidad socioeconómica mientras financia una guerra prolongada. Información extraída del medio BBC.