Con una alta adhesión, el Sindicato de Obreros y Empleados Municipales de Esquel y Zona Oeste inició esta mañana una retención de servicios por 48 horas con asamblea permanente en el Municipio de Esquel. La medida es en rechazo a la oferta del 5% propuesta por el Ejecutivo Municipal en el marco de la negociación por la cláusula gatillo acordada en la última paritaria del 2018.
Las partes en septiembre del año pasado habían quedado en volverse a juntar a mediados de 2019 con el fin de acordar un reajuste en base al índice de inflación que arrojara el INDEC. El mismo fue del 50,6% en la región patagónica. Sin embargo los trabajadores durante el 2018 percibieron un aumento del 34%, quedando por debajo de esa cifra. Por lo tanto el gremio pide un 16% para que los trabajadores municipales recuperen el poder adquisitivo que perdieron.
El Secretario General del SOEME y ZO, Antonio Osorio, destacó la importante adhesión de los trabajadores municipales a la medida de fuerza y señaló que “esto demuestra que hay una preocupación de los trabajadores por la situación en la que estamos”.
Asimismo explicó que se decidió iniciar una retención de servicios por 48 horas en el marco de una asamblea con afiliados y no afiliados que se llevó a cabo el viernes pasado. “Nos llamó la atención que después de tres reuniones con el Ejecutivo Municipal no se haya mejorado la primera oferta cuando nosotros en la paritaria de 2018 acordamos un aumento del 14% en el primer semestre y un 20% en el segundo en dos cuotas más la cláusula gatillo y hay mucha diferencia con el índice de inflación”, planteó.
Sin embargo Osorio aseguró que se encuentra abierto al diálogo si el municipio lo requiere. “Todo es negociable, nosotros estamos dispuestos a escuchar cuál es su propuesta, inclusive hasta hemos hablado de la posibilidad de adelantar la paritaria del primer semestre”, indicó.
“Perdimos poder adquisitivo”
El dirigente sindical se mostró muy preocupado por la actual situación económica. “El sector privado está muy debilitado, la producción también está mal, entonces en el sector público no se pueden hacer milagros tampoco. Claramente esto pone de manifiesto que nos está yendo mal a todos”, lamentó.
De esta manera pidió dejar de lado algunas cuestiones y sentarse a hablar para buscar una solución a este conflicto y a la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores. “El año pasado hemos perdido poder adquisitivo y si la idea de ellos es que esto no suceda como lo han dicho, tenemos que mantenerlo así”, apuntó.
En este sentido expuso que desde el municipio “nos están pidiendo que nos resignemos cuando los que menos ganan no llegan a fin de mes, no pueden pagar el alquiler y las tarifas siguen subiendo”.
Por su parte el Ejecutivo Municipal aún no se comunicó con el gremio para retomar el dialogo y arribar a una solución. Por el momento la medida de fuerza continuará este martes, tal lo estipulado, y luego en asamblea se resolverá cómo seguir.