Desde el Ministerio de Salud preparan una batería de medidas tendientes a «disminuir al máximo la posibilidad de riesgo de contagio de hantavirus».
El Ministerio de Salud del Chubut se prepara para afrontar la llegada de la temporada estival con una batería de medidas tendientes a «disminuir al máximo la posibilidad de riesgo de contagio de hantavirus», adelantó el director asociado del Área Programática Esquel, Jorge Elías.
El especialista recordó que «nunca dejamos de trabajar en el terreno, sobre todo en la población de Epuyén», sobre el noroeste chubutense, que fue epicentro el año pasado del mayor brote de hantavirus que se recuerde en esa localidad, con el saldo de 11 víctimas fatales sobre 34 casos confirmados.
Chubut se vio obligado a implementar el llamado aislamiento preventivo para quienes habían tomado contacto con personas afectadas por la enfermedad que trasmite el «ratón colilargo», una medida sanitaria jamás empleada hasta entonces que abarcó a un centenar de pobladores y que contó con el aval de la justicia, incluso para utilizar la fuerza pública y obligar a su estricto cumplimiento.
«Una vez que el brote cesó, quedó en la zona personal del área de salud mental trabajando para superar el problema porque hay mucha gente que quedó afectada, sobre todo los familiares directos de víctimas fatales», explicó Elías.
El funcionario reconoció que «el hantavirus es un fenómeno endémico en la cordillera norte de la Patagonia, siempre van a aparecer casos, pero lo importante es que se tengan las herramientas para prevenirlo, sobre todo a quienes realizan actividad en el medio agreste».
Elías informó que «se trabaja en conjunto con el Ministerio de Turismo para articular medidas de prevención y esperar que tengamos una temporada exitosa, con muchos visitantes que lleguen a la comarca, que tiene unos recursos paisajísticos maravillosos».
El último caso que se reportó de hantavirus fue el 8 de febrero pasado, aunque las medidas de emergencia se implementaron hasta entrado el mes de marzo, así lo informó ADN Sur.
El período estacional del hantavirus está ligado estrechamente a las condiciones climáticas, por lo cual, ante la llegada del período estival se «actualizan los mecanismos de respuesta en los hospitales de la comarca andina y particularmente en Esquel, que es el hospital cabecera» describió