La caída se desaceleró respecto del mes anterior pero sigue siendo fuerte en todos los canales, especialmente en los autoservicios y almacenes.
A pocas horas de que se conozca el dato de la inflación de octubre, que según estimaciones oscilará entre 4 y 6%, se conoció lo que ocurrió durante el mes pasado, con las ventas en los almacenes, autoservicios y supermercados. El consumo masivo cayó 5,4%, y acumula una baja, en el año, del 7,4%, según los datos que maneja la consultora Scentia.
A pesar de la contundencia del número, los datos también muestran que, en octubre se produjo una desaceleración en la caída del volumen, dado que en septiembre el desplome había sido del 9,4%. Esta vez, la caída fue similar a la de agosto (-5,4%).
Del mismo modo, el índice de precios también se desaceleró, aunque el incremento continúa siendo alto. Según los datos de la consultora, acumulan 49,1% en forma interanual.
Osvaldo del Rio, titular de Scentia afirma que «se mantiene el desempeño negativo en las ventas del consumo masivo. Y es más notorio en los autoservicios que en las cadenas de supermercados», advierte. La caída en los primeros, promedió el 8,7%, mientras que en las góndolas de las principales cadenas, más propensas a aceptar tarjetas de crédito y sumarse a las promociones, la menores ventas promediaron una caída del 2%. Otro relevamiento reciente de las ventas sólo en supermercados que pertenece a Nielsen arrojó una caída del 1,2% en el mismo lapso. También en esta medición se hizo evidente una desaceleración importante respecto del mes anterior (-6,9%).
Según la medición de Scentia, el retail se deterioró mas en el interior del país (-5,8%) que en la Capital Federal y el Gran Buenos Aires, donde la baja fue del 4,9%, según los datos de Scentia.
En cuanto a las categorías, según explicó el analista, «el segmento de las bebidas y alimentos perecederos más los congelados (-8,3%) «son los sectores que presentan la mayor retracción, en línea con lo que ya hemos visto en otros periodos», agregó. Las bebidas cayeron 7,6%; y aquellas sin alcohol lo hicieron un 8%. En tanto los productos de limpieza para la ropa y el hogar cayeron 5,5% y aquellos artículos vinculados a la categoría «desayuno-merienda» se contrajeron 5,7%.
Finalmente, sobre el escenario en que se está desenvolviendo el consumo masivo, rehén de los aumentos de precios y del deterioro del poder adquisitivo, del Rio describió: «es claro que estamos atravesando un periodo de transición, con grandes incógnitas para el próximo año, tanto en términos de posibles escenarios como de definiciones políticas que determinen el futuro económico», informó Clarín.