El presidente venezolano, Nicolás Maduro , reveló hoy que se puso en contacto con los gobiernos de la Argentina, España, México, Panamá y Rusia para trasladarles su propuesta de crear un grupo de «países amigos» que se encargue de favorecer el diálogo en el país caribeño.
«Es público y notorio que nosotros le hemos propuesto al gobierno argentino oficialmente que participe de un conjunto de gestiones y acciones para ayudar al diálogo nacional de Venezuela», dijo Maduro en una conferencia de prensa en el Palacio de Miraflores, al ser consultado sobre la postura del presidente Alberto Fernández respecto de Venezuela.
El mandatario señaló que su intención es «conformar un grupo de países amigos que favorezca el proceso de diálogo antes, durante y después» de las elecciones parlamentarias previstas para este año, y subrayó la importancia de que el diálogo se produzca antes de los comicios, para lograr un Consejo Nacional Electoral (CNE) «de consenso». La oposición rechaza la composición actual del organismo electoral dominado por personas afines al chavismo.
Asimismo, Maduro sostuvo que dicho proceso «debería conocer todas las acciones ante el Tribunal Penal Internacional (TPI) para exigir el cese de todas las medidas coercitivas contra Venezuela por parte del Gobierno de Estados Unidos», en referencia a la denuncia presentada anteayer por su ministro de Exteriores, Jorge Arreaza, ante el TPI por supuestos crímenes de lesa humanidad propiciados por las sanciones de Estados Unidos contra el país, que considera «ilegales».
Reunión secreta
Maduro también se refirió al encuentro que protagonizaron la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, y el ministro de Transportes de España, José Luis Ábalos, el mes pasado en el aeropuerto internacional de Madrid, del cual se desconoce el contenido.
«Eso es secreto de Delcy, ella no me ha contado ese secreto, qué habló con Ábalos», dijo Maduro con una sonrisa en una conferencia de prensa en el Palacio de Miraflores. En España «han hecho una novela (…), el ‘Delcygate’. Siempre con la idea de perjudicar a Venezuela, una campaña permanente en España contra Venezuela», agregó Maduro, que precisó que Rodríguez emprendió una gira internacional «normal».
El acontecimiento provocó un fuerte rechazo de los partidos opositores al gobierno de Pedro Sánchez, que aludieron a la medida que impuso la Unión Europea (UE) para restringir el tránsito de Rodríguez y otros funcionarios del régimen chavista dentro de su territorio, a mediados de 2018.
La polémica se conoció días antes de una visita de Guaidó a España, uno de los países que lo reconocen como el legítimo líder de Venezuela. Por su parte, Ábalos, presionado por la oposición, dio distintas versiones sobre lo ocurrido en el aeropuerto.
Advertencia a Guaidó
Por otro lado, el presidente afirmó que el líder opositor Juan Guaidó -que desafió una orden judicial al salir del país el mes pasado- no fue detenido por las autoridades porque los tribunales no lo ordenaron, pero advirtió que ese día «llegará».
«El día que los tribunales de la república den el mandato de detener a […] Guaidó, por todos los delitos cometidos, ese día va la cárcel», sentenció el dirigente socialista.
España, junto a la mayoría de los países de la UE, no considera legítimo al gobierno de Maduro y reconoce en su lugar al opositor, Juan Guaidó, como presidente de Venezuela.