Entramos en los días previos de una nueva temporada nacional de langostino que contará con innumerables condimentos que la hacen atípica y compleja.
Por arrancar el Covid 19 que ha dejado al mundo perplejo, con muchas economías a nivel mundial en recesión, sociedades adaptándose a un nuevo mundo hasta reviendo las obligaciones y rutinas cotidianas de su vida. Es indudable que todas estas variables juntas hacen un cóctel explosivo para la comercialización del Langostino Argentino Patagónico sabiendo que sus destinos; hoteles y restaurantes principalmente se encuentran cerrados y con la incertidumbre de no saber quiénes ocuparan sus sillas y habitaciones cuando vuelvan a levantar sus persianas.
Como consecuencia se ven afectadas las ventas y los precios que llevan al sector empresarial y sindical a negociaciones hostiles en donde las empresas asociadas a Capip y Capeca quieren retrotraer sus convenios y pesificarlos, bajo los fundamentos que el mundo cambiará. Del otro lado del escritorio consideran eso imposible y hasta se animan al pedido de aumento, claro que tendrán que encontrar una media si es que la intención es trabajar en este 2020.
Si se piensa en el recurso, las probabilidades de no estar activo o en realidad a mínimas posibilidades entendiendo que las flotas fresqueras de altura y costeras marplatenses si lograron un acuerdo con sus tripulaciones y eso les daría luz verde para emigrar a aguas nacionales en busca del crustáceo patagónico, que por otra parte distintas organizaciones de la provincia del Chubut le estarían solicitando a entidades gubernamentales que la mercadería descargada en los puertos chubutenses no puedan ser transportada fuera de su jurisdicción como medida preventiva del Covid 19, hecho que complicaría bastante la operatoria en plenitud de las flotas mencionadas si buscan comercializar sus capturas con frigoríficos y cooperativas en Mar del Plata.
A la única conclusión positiva que se podría abordar sería que la cuestión biológica lograría evolucionar para las venideras temporadas y con la demanda más activa e interesada en el langostino patagónico.
Todo invita a creer que la temporada 2020 será recordada pero no por lo espléndida sino todo lo contrario, señaló Pesca Chubut.