El intendente de El Bolsón, Bruno Pogliano, solicitó este fin de semana la intervención de la Justicia y de las fuerzas federales de seguridad para desalojar a más de un centenar de familias que ocuparon tierras en la reserva forestal de Loma del Medio el viernes pasado.
“Llama la atención el nivel de organización y la velocidad con la cual se instalaron. Hay referentes que tienen que ver con la política y miembros de organizaciones sociales, pero no tienen una conducción formal”, explicó a Infobae el intendente, quien desmintió que se trate únicamente de personas de origen mapuche.
Según detalló, muchos de los ocupantes se movilizaron puramente por especulación e incluso ya comenzaron a vender los lotes ocupados. Las tierras pertenecen formalmente al Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), que tenía planeado cederlas al municipio.
La reserva forestal Loma del Medio fue creada en 1948 para proteger miles de hectáreas de bosque andino patagónico. Muy cerca de ese lugar ya hubo una toma de tierras en 2011; aproximadamente 1.500 personas todavía permanecen en el lugar.
Desde la Municipalidad recurrieron inmediatamente a la Justicia federal para poner fin a la reciente toma. Sin embargo, la fiscal federal Silvia Little todavía no ordenó ninguna medida preventiva. “La fiscal es reticente a ordenar el desalojo. Hizo una inspección ocular y ahora hará los informes correspondientes, pero esa lentitud llevó a que la gente se haya instalado”, lamentó el intendente Pogliano.
Ante el reclamo de que movilicen personal para evitar que se instalen más ocupantes, tanto desde la Gendarmería como la Policía Aeroportuaria argumentaron que no tienen personal suficiente para hacer rondas por el lugar. “Ninguna fuerza federal acudió al pedido de proteger un área natural que tiene en vilo a los 50 mil habitantes de El Bolsón”, dijo Pogliano.
Para intentar poner un freno a la situación, el Municipio cortó todos los accesos al lugar con la policía local y los agentes de tránsito. Incluso secuestraron 17 vehículos vinculados a la toma.
Según explicaron las autoridades locales, el lugar de la toma no es apto para soportar la instalación de viviendas. “Además tiene un impacto terrible. En una ciudad que se jacta de ser turística, que te ocupen el mirador y la postal de la localidad, afecta mucho a nuestra principal actividad”, señaló el intendente.
“A la espera de que la Justicia competente ordene el desalojo, hemos realizado acciones tendientes a frenar la toma. Como hijos de este pueblo, no vamos a permitir el avance de la toma. El reclamo es de toda la comunidad, juntos debemos defender la reserva forestal y evitar este terrible daño ecológico”, planteó Pogliano en un video que difundió a través de las redes sociales.
Desde el punto de vista político, la gobernadora rionegrina Arabela Carreras se solidarizó con las autoridades municipales e instruyó a su ministro de Seguridad a que se ponga en contacto con su par de Nación para intentar darle una pronta solución.
Fuentes locales explicaron que la reticencia de la Gendarmería a intervenir se explica en parte por el miedo a que se repitan episodios como los de Santiago Maldonado y Rafael Nahuel.