Brasil sigue anotando récords por el impacto de la pandemia de coronavirus, con cifras diarias de muertos que ya superan los 4.000, mientras el presidente Jair Bolsonaro ha pasado del negacionismo a la resignación porque, asegura, «prácticamente es imposible de erradicarlo».
Las cifras últimas dan cuenta de que en las 24 horas cerradas este martes en Brasil murieron 4.195 personas a causa de la covid-19, por primera vez por encima de los 4.000 decesos y apenas dos semanas después de que se llegara a la marca de 3.000 fallecidos.