La diputada Aguilera de Juntos por el Cambio cuestionó el recorte presupuestario del Gobierno Nacional en materia educativa.
María Andrea Aguilera, Diputada de Juntos por el Cambio expresó que “El Frente de Todos vuelve a la carga contra la educación. Luego de mantener las escuelas cerradas en todo el país, y ajustar el presupuesto del año en curso en planes vinculados a primera infancia y el famoso Conectar Igualdad del que tanto se jactan, el recorte del 15,5% para el presupuesto 2023 es un golpe de efecto contra la educación pública.”
Cuestionó la inacción del Gobierno Nacional frente a la crisis educativa de Chubut sosteniendo que “vivimos en la única Provincia del país que hace cinco años los niños, niñas y adolescentes no pueden ir a la escuela todos los días, y el Gobierno Nacional ignora, al igual que el provincial, sistemáticamente esta situación de crisis.”
Analizando el presupuesto, Aguilera indicó que “El presupuesto en educación que se sancionó en la Cámara de Diputados es el segundo más bajo de los últimos once años, siendo el más bajo de todos el del año 2020. Y, tampoco podemos dejar de mencionar el destino del presupuesto dado que las prioridades están dudosamente establecidas. Este presupuesto le brinda más recursos que el año en curso a las Acciones de Formación Docente, mientras que se ajustan áreas clave como Evaluación de la Calidad Educativa y Becas Estudiantiles, por ejemplo.”
La Diputada sostuvo que se trata de una Catástrofe Educativa “Nadie se hace cargo de nada. Fueron públicos los resultados de la evaluación Aprender y fuimos testigos de la verdadera catástrofe educativa con valores que exponen el deterioro que viven los niños, niñas y adolescentes en cuanto a sus aprendizajes. Están comprometiendo el presente y el futuro de muchas generaciones. Mientras el mundo avanza hacia un paradigma de desarrollo del conocimiento, con una fuerte apuesta en las economías basadas en el conocimiento, y cuando el mundo pone el centro en la formación de calidad, Argentina parece ir a contramano, sin un plan y dejando como último orejón del tarro a la Educación.”
Por último dijo que “El Estado presente que pregonan como un vacío discurso se ha transformado en un estado abandónico que no solamente deja a su suerte a millones de niños y niñas, sino que tampoco asume la gravedad de sus actos porque no le importan las consecuencias. Lejos está, lamentablemente, la Educación de volver a escribirse con mayúsculas mientras el populismo siga en el poder.”