El ministro Miguel Castro está tan preocupado en el curro de los alquileres de camionetas para el Ministerio de Seguridad que se olvidó de pagarle el sueldo a los efectivos. Estaría bueno ponerle a él un chaleco antibalas y mandarlo junto a su ladero Rubén Becerra a los barrios más peligrosos de la provincia sin pagarles el salario durante todo un mes, solo para ver cuando duran en ese esquema de trabajo.
La comunidad policial se volvió a organizar nuevamente para gestionar la entrega de bolsones de comida, debido a que hay policías que se quedaron sin dinero y no pueden alimentar a sus familias.
Cque no íbamos a ver más policías revolviendo la basura para vender chatarras y llegar a fin de mes, como fue el caso del cabo Ramírez, que en 2021 se grabó a sí mismo en el medio de un basural de la ciudad donde prestaba servicio, Carrenleufú, localidad ubicada en Futaleufu en la región andina de la provincia.
Ese video se lo mandó a su superior, y éste se encargó de viralizarlo. En el paso de dos horas ya había generado un escándalo en las redes.
El cabo primero Ramírez, filmándose a él y a su familia en el medio del basural en el año 2021, recolectando basura para sobrevivir bajo la gestión de Federico Massoni. Una situación que no está lejos de repetirse.
Ese video fue emblemático, porque se convirtió en el fiel reflejo del desinterés por parte del Ministerio de Massoni, quién se encontraba más preocupado en usar los elementos del estado para su ridícula campaña política por las redes sociales, que en la situación en la que se encontraban los empleados policiales.
Todo parece indicar que vamos a volver a esas épocas, porque claramente Castro y compañía están haciendo oídos sordos a los reclamos de los efectivos y ya se está empezando a caldear el clima de a poco.
Marcos Crespo, el delegado del Consejo de Bienestar Policial de Trelew rompió el silencio y salió a manifestarse a los medios para dar a conocer lo que estaba ocurriendo con los jóvenes agentes que entraron en funciones recientemente.
Marcos Crespo, delegado de Bienestar Policial Trelew.
“(…) ellos egresaron el 7 de diciembre y hasta la fecha no han cobrado. Le pagaron solo una beca de 8.500 pesos. Al haber muchos padres y madres de familia –que se han venido endeudando– salió de nosotros hacer una colecta para ayudarlos aunque sea con alimentos” dijo el delegado.
Ahora se ve que desde jefatura vieron que se está poniendo complicado el panorama, porque la cúpula prometió que en febrero se iban a regularizar los pagos.
Pero lo leído hasta aquí no es todo, circula la información de que los empleados policiales que no cobran salen desarmados a cumplir con sus funciones, esto debido a que por alguna extraña razón no les han proveído de sus armas reglamentarias. Nos gustaría saber quién va a responder si a estos jóvenes policías les llega a pasar algo en algún operativo.
Brandt prometió que los pagos iban a ser retroactivos a diciembre, enero y un porcentaje del aguinaldo pero esto recién sería en febrero. Crespo igualmente ya aseguró que van a hacer todo lo posible para conseguir bolsones de comida hasta que llegue ese día del supuesto pago, “(…) hasta ese momento habría que ayudarlos con lo que podamos para que puedan tener un plato de comida en la casa”.
Según Crespo, la cantidad de empleados que se encuentran en esta situación desesperante ascendería a 200 entre agentes masculinos, femeninos y contando además a oficiales y subalternos que se encuentran en las mismas circunstancias.
Crespo y sus colegas con toda la comida que han conseguido acopiar hasta al momento para ayudar a los policías.
Lo que no se puede entender es cómo el Ministerio de Seguridad no pudo prever esto sabiendo que el 7 de diciembre iban a haber egresos de aspirantes, ¿pensaban que lo iban a tener calladitos, trabajando gratis y sin emitir ningún reclamo?