Este miércoles se conmemora el tercer aniversario de la histórica victoria de la Selección Argentina de fútbol en la Copa América, donde Lionel Messi finalmente logró su primer título con la selección mayor.
Hace tres años, en una noche mágica en el Estadio Maracaná, la Selección Argentina de fútbol logró una de sus victorias más memorables al ganar la Copa América. Este triunfo, que se ha convertido en un hito en la historia del fútbol argentino, significó mucho más que un título. Fue el primer campeonato que Lionel Messi levantó con la selección mayor, después de varias finales fallidas y una larga espera que había generado dudas y frustraciones entre los hinchas y el propio Messi.
En ese memorable 10 de julio, Argentina se enfrentó a Brasil en su propio terreno, un desafío que hacía aún más épico el encuentro. La Selección Argentina, liderada por Lionel Messi, mostró un juego impecable y una determinación férrea que culminó en una victoria por 1-0, con un gol de Ángel Di María. «Este título es para mi familia, para mi país. Lo deseaba mucho, soñé con esto muchas veces», expresó Messi emocionado al final del partido.
La victoria en el Maracaná no solo rompió una racha de casi tres decadas sin títulos para la Selección Argentina, sino que también reivindicó a Messi, que tantas veces había estado cerca de la gloria con la selección nacional. «Tantas finales fallidas, tanta lucha, pero nunca dejamos de creer. Hoy nos llevamos la gloria en el Maracaná», destacó el capitán argentino en la rueda de prensa posterior al partido.
El «Maracanazo», como fue bautizado por los medios y los hinchas, es recordado no solo por el título en sí, sino por el contexto en el que se logró. Ganar en el Maracaná, uno de los templos del fútbol mundial, y contra Brasil, el eterno rival, le dio a la victoria un sabor especial y una carga emocional que los argentinos guardarán para siempre. «Jugar en el Maracaná y ganar contra Brasil es un sueño hecho realidad», comentó el técnico Lionel Scaloni, que también celebraba su primer gran logro como entrenador de la Selección.
Este logro revitalizó a la Selección Argentina y fortaleció la figura de Messi, quien finalmente pudo compartir un título importante con sus compatriotas. «Lo más importante es que logramos el objetivo y le dimos una alegría inmensa a nuestro país», resaltó el astro argentino, que desde entonces ha sido visto con otros ojos por aquellos que alguna vez dudaron de su compromiso con la albiceleste.
Tres años después, el recuerdo de esa noche en el Maracaná sigue vivo en la memoria de los argentinos, quienes celebran esta fecha con orgullo y emoción. «Este triunfo es un punto de inflexión. Nos dio la confianza y la fuerza para seguir adelante», afirmó Scaloni, quien ha llevado al equipo a nuevas alturas desde entonces.
El «Maracanazo» de 2021 no solo fue un triunfo deportivo, sino un momento de unión nacional, un bálsamo en tiempos difíciles de pandemia y una reafirmación del talento y la pasión que caracteriza al fútbol argentino.