Designación de Lijo divide al PRO. El Gobierno de Javier Milei confirmó este martes que designará por decreto a los jueces Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla para completar la Corte Suprema de Justicia de la Nación, y eso generó un rechazo casi unánime en la oposición. No obstante, hasta ahora, el PRO no se expresó al respecto.
Y es que en el partido fundado por Mauricio Macri hay distintas posturas, pese al rechazo público del expresidente a la candidatura de Lijo. “Pienso lo mismo que le dije a Javier [Milei], que no estaba de acuerdo, me parece que es un error“, afirmó a TN meses atrás. Y advirtió que todo el espacio votaría en contra. Ahora, con la decisión de hacerlo por decreto, recrudecen las diferencias internas en el PRO.
La decisión de nombrar a Lijo por decreto puede tensar aún más las negociaciones para sellar una alianza política y electoral entre La Libertad Avanza y el PRO. Incluso un sector del partido lo había puesto como condición para avanzar en un acuerdo.
“Para algunos puede ser un impedimento. Para otros, no”, señaló a TN un dirigente bonaerense del PRO. Y remarcó que “no es novedad el tema Lijo. Hace 9 meses propuso el Gobierno la candidatura de Lijo”, indicó.
En la misma línea, otro referente del partido explicó que “no cambia nada que ahora sea juez. Si no, tendrían que haber sido más convincentes”. No obstante, reconoció que “hay diferencias en el PRO. Es lógico y eso está claro”.
“Intendentes, gobernadores y dirigentes del PRO apoyaron la designación de Lijo meses atrás”, apuntó alguien que se inclina a favor de una alianza con los libertarios. Y aclaró: “Estaba todo partido en el PRO. Es falso que había una posición única”.
Algunos también planteaban que el Presidente tenía derecho a nombrar un juez y que el Senado lo trate. El problema ahora es el proceso, que será difícil que cuente con el aval del partido. “Algunos saldrán a diferenciarse y otros mirarán para otro lado”, indicó una fuente calificada del PRO a este medio.
En cualquier caso, se espera que la designación por decreto de los jueces de la Corte sea debatida en la reunión de la mesa chica del partido prevista para este miércoles a la tarde, en la sede del PRO de calle Balcarce.
Es muy posible que de allí salga un comunicado del partido, como suele ocurrir en estos casos. Pero lo que se apuran a remarcar diferentes dirigentes del espacio es que dicho documento no marcará el rumbo de las negociaciones políticas con LLA.
Según se pudo saber, no asistirán los gobernadores Rogelio Frigerio (Entre Ríos) ni Ignacio Torres (Chubut), porque estarán con agenda en sus provincias. Sí está confirmada la presencia de los diputados nacionales Diego Santilli y María Eugenia Vidal, y del intendente de General Pueyrredón, Guillermo Montenegro.
Sucede también que la conformación de una alianza electoral del PRO con La Libertad Avanza dependerá de distintos factores. Y además, no serán iguales las negociaciones en todos los distritos. Se sabe, hay diferencias de criterios donde el partido fundado por Macri es gobierno y donde no lo es.
Por estas horas -y desde hace varias semanas- la decisión de un acuerdo se inclina a ser “distrito por distrito”, más allá de los intentos por sellar un pacto macro. Y al margen de las dificultades para concretar un acuerdo integral entre ambos partidos, hay dos territorios clave que harán las veces de termómetro de la elección: la Ciudad y la provincia de Buenos Aires. Y en ellas se presentan escenarios opuestos: está casi descartado un acuerdo en CABA; y se agotarán esfuerzos para poder concretarlo en territorio bonaerense.