Gobierno regulación fraudes criptomonedas. Luego del escándalo de Javier Milei con la criptomoneda $LIBRA, el Gobierno argentino está avanzando en la implementación de nuevas medidas para prevenir fraudes en el ámbito de las criptomonedas, con el objetivo de proteger a los inversores.
La iniciativa llega en un momento de creciente controversia debido a la promoción del mencionado token por parte del presidente Milei, cuyo apoyo habría provocado pérdidas cercanas a los US$100 millones.
En este marco, la Comisión Nacional de Valores (CNV) está trabajando en una regulación más estricta para el sector cripto, que incluye la obligación de las empresas a proporcionar información detallada sobre sus acuerdos con terceros y sobre cómo se realiza el referenciamiento de clientes.
De este modo, la CNV busca asegurar una mayor transparencia y obtener un panorama más claro del respaldo que tienen estas empresas, muchas de las cuales son relativamente desconocidas.
La Cámara Argentina de Fintech, por su parte, ha respaldado esta nueva regulación, señalando que es un paso clave para el crecimiento y la expansión del sector en el país. A pesar de este apoyo, la entidad también expresa preocupación por el impacto que el denominado «criptogate» podría tener en una industria en la que Argentina se destacaba a nivel regional.
Es importante recordar que el token $LIBRA, al momento de su lanzamiento, no estaba registrado en las principales billeteras digitales de Argentina. Sin embargo, a pesar de ello, el presidente Milei lo recomendó públicamente. En este contexto, la nueva regulación también establecería la exigencia de un patrimonio neto mínimo para que las empresas del sector puedan registrarse ante la CNV, lo que busca garantizar un mayor nivel de seguridad en el mercado de criptomonedas.
El pasado viernes 14 de febrero, el presidente Javier Milei promocionó la criptomoneda $LIBRA como parte de un proyecto privado destinado a «fondear pequeñas empresas y emprendimientos argentinos». Sin embargo, la publicación en redes sociales generó un fuerte revuelo.
El primer posteo impulsó la cotización de la criptomoneda en más del 1.000%. Cinco horas después, Milei admitió que no estaba completamente informado sobre la operatoria del activo y borró el mensaje original, provocando un desplome.