En un sorpresivo cambio de postura, el presidente estadounidense Donald Trump anunció este domingo que apoya una votación en la Cámara de Representantes para publicar todos los archivos relacionados con el fallecido delincuente sexual Jeffrey Epstein.
La declaración llega apenas horas después de conocerse que los republicanos votarán este martes para forzar la divulgación completa de los documentos, en medio de una creciente polémica por correos electrónicos que vinculan a Trump con el financiero. Según la información de la agencia DW, de la cual se extrae este análisis, el mandatario calificó la controversia como un «engaño demócrata».
Un Giro Estratégico en Medio de la Crisis
Trump justificó su nueva posición argumentando que «los republicanos de la Cámara deberían votar a favor de la publicación de los archivos de Epstein porque no tenemos nada que ocultar». Este cambio radical ocurre tras revelarse correos electrónicos obtenidos de la herencia de Epstein donde el financiero escribió que Trump «sabía de las chicas». La semana pasada, el Congreso ya había publicado unos 20.000 archivos del expediente que incluyen mensajes donde Epstein menciona a Trump y sugiere que el ahora presidente conocía sus crímenes.
El Escenario Político y las Divisiones Republicanas
El legislador republicano Thomas Massie, promotor de la iniciativa, expresó que cuenta con aproximadamente 100 apoyos dentro de su partido, suficientes para superar un eventual veto presidencial si se suman los votos demócratas. Este tema ha generado divisiones inusuales en el típicamente leal Partido Republicano, alejando a Trump de algunos aliados clave de su movimiento «Make America Great Again». Incluso atacó a la congresista Marjorie Taylor Greene y le retiró el apoyo para su campaña de reelección en 2026.
Las Implicaciones y las Acusaciones Cruzadas
Demócratas en el Comité de Supervisión de la Cámara afirmaron que los mensajes «plantean serias preguntas sobre Donald Trump y su conocimiento de los horribles crímenes de Epstein». Los archivos también revelan vínculos de Epstein con otras figuras prominentes como el expresidente Bill Clinton y Larry Summers, exasesor económico de Barack Obama. Como contrapartida, Trump exigió a la Fiscal General Pam Bondi y al FBI que investiguen los vínculos de Epstein con Clinton y Summers, en un claro intento por ampliar el foco de la controversia.




