La ministra de Desarrollo Territorial y Sectores Productivos, y ex ministra de Economía de la provincia, Gabriela Dufour, indicó hoy que la Ley de Emergencia Económica que impulsa el Gobierno entrante “tiene tres patas de la vergüenza”, al tiempo que agregó que de lo que se trata es de “un problema de gravedad institucional, no de números o de economía”.
En declaraciones a la prensa, la funcionaria, quien a su vez es diputada provincial electa por el Frente para la Victoria, indicó: “la Ley de Emergencia tiene tres patas de la vergüenza. La primera de ellas es el avasallamiento a los otros poderes: hablar de emergencia para el Poder Legislativo y el Poder Judicial y, además, poner en marcha una emergencia administrativa, da la pauta de que lo que se quiere es liberarse de todos los controles”.
“La segunda es que quieren cercenar los derechos de todos los contratistas y proveedores del Estado; en una mesa sin claridad y sin transparencia, denunciar cualquier mecanismo de contrato o deuda, por lo tanto eso es la institucionalización de la corrupción”, agregó.
“Y la tercera pata de la vergüenza es un endeudamiento en 650 millones de dólares que no tiene justificación en ningún número y además no dice para qué lo quieren hacer”, explicó.
En este sentido, afirmó que “me parece que la población tiene que tener en claro las tres patas de la vergüenza de esta Ley de Emergencia. Tienen que quedar clarificadas porque si no, lo único que estamos viendo es la caída de la república en manos de alguien que quiere tener la suma del poder público”.
Al ser consultada acerca de la situación actual de la provincia, Dufour afirmó: “conozco los números, porque los dos primeros años de la actual gestión años fui ministra de Economía; los que se están dejando no son muy distintos de los que me dejaron a mí, con un compromiso de obra de un año y medio, con la posibilidad de hacer frente con la recaudación del mes de diciembre a los pagos de sueldos y aguinaldos, y con un endeudamiento como el Fideicomiso Chubut que no había terminado de ingresar el dinero y ya estábamos pagando los intereses a una tasa más alta de lo que el mercado estaba admitiendo”.
En este contexto sentenció: “no sé si es una burla o si efectivamente están manteniendo este esquema de instalar la mentira. Porque en los últimos cuatro años hemos tenido momentos muy difíciles, como la pérdida de regalías totales en Cerro Dragón o la caída de precios internacionales, y siempre hemos pagado en tiempo y forma los salarios; cumplimos con una regularidad de más o menos 60 días en las obligaciones del Estado, y ahora estamos en las mismas condiciones”.
“Me parece que esta gente no tiene las capacidades para afrontar una administración austera, sino que está acostumbrada a la abundancia y el despilfarro. Pero quien tiene capacidad para hacer una administración austera no va a tener ningún problema para darle continuidad a un Estado sólido”, aclaró.
“Este es un problema de gravedad institucional, no de números o de economía”, aseveró.
Por último, la funcionario provincial habló sobre la transición: “en que la medida que no haya respeto a nosotros como personas y como funcionarios, que no tengamos que ser víctimas de descalificaciones mediáticas y que no estemos sometidos a esta gran mentira que están intentando montar, no podemos hablar con gente que ejercer mecanismos de Joseph Goebbels como guía, en el sentido de ‘miente, miente que algo quedará’”.
“No hay razones para una emergencia económica, y para no tener un trato respetuoso, pero es muy difícil hablar con gente que utiliza la descalificación y la mentira como mecanismos de instalación política”, concluyó.
El Comodorense