Hace 15 días, el delegado del IPV en Comodoro Rivadavia, Daniel Carrizo, anuncio junto al jefe de la Policía del Chubut, Juan Luis Ale, que luego de la firma de un convenio, el Instituto Provincia de la Vivienda le cedía a la fuerza policial una vivienda en el barrio Ciudadela –la cual había sido usurpada- para que se construya un puesto policial.
Con el fin de preservar la vivienda para que no vuelva a ser usurpada, desde hace 15 días efectivos policiales la custodian mañana, tarde y noche.
La familia que usurpó de manera ilegal esta casa construida por el IPV fue reubicada en otra zona, pero el Instituto Provincial de la Vivienda no controló que el inmueble sea entregado en condiciones óptimas.
La casa fue desvalijada, los usurpadores se llevaron el tanque de agua, los porta lámparas, el termotanque, la cocina y hasta el bajo mesada. Nadie del IPV se acercó hasta el lugar para ver las condiciones deplorables en la que tienen que custodiar la casa los policías.
La única forma de asistir al baño es cargando un balde con agua fría desde la canilla que está en el patio. Desde la Vecinal del barrio Ciudadela, les acercaron un tanque pero aun no puede ser instalado porque también se robaron las cañerías por donde se debe hacer la conexión.
Carrizo, como delegado del IPV en la ciudad, debería haber controlado que la vivienda esté en condiciones óptimas, antes de anunciar con bombos y platillos que les cedían la casa a la Policía. Pero una vez más, vemos como a algunos funcionarios solo les importa ganar protagonismo con cero gestión en el terreno. Habría que preguntarle a él directamente que medida propone para cuidar una casa las 24 horas de día sin agua, sin calefacción y sin ni siquiera la garantía de tener un baño a disposición.
¿Cómo espera el IPV que se pueda construir un puesto policial cuando ni siquiera tienen agua para ir al baño?
Anuncios rimbombantes se pueden hacer siempre, con firma y foto de por medio pero esto a la comunidad de zona Norte y a los efectivos policiales no le sirve de nada. Se necesita determinación y sobretodo gestión para poder garantizar la seguridad de los vecinos.
Otra mancha más al IPV que lamentablemente parece no entender la urgencia que tienen los ciudadanos de contar con un puesto policial ante la ola de inseguridad que viven todos lo días.
El Comodorense