En las últimas horas volvió a haber otra preocupante sucesión de asaltos a mano armada en Trelew, con la diferencia de que en esta ocasión la policía logró detener al autor de uno de esos hechos, al que en una peluquería asaltó a la dueña y a una clienta con un cuchillo.
A este atraco se le sumaron el que anteanoche se registró en una fiambrería que abrió hace un mes y el de un repartidor de pollos al que cuatro maleantes a punta de pistola le robaron la recaudación.
Este suceso ocurrió ayer alrededor del mediodía en la zona oeste de la ciudad; cuando la víctima, de unos 25 años, se encontraba repartiendo mercadería en un almacén de Río Senguer, entre Pascual Daleoso y Paso de Indios, en el barrio Abel Amaya. Allí la banda de malvivientes sorprendió al distribuidor y le robó entre 4.000 y 9.000 pesos.
Robo a repartidor
En principio trascendió que había sido un robo muy violento e incluso que a la víctima la habían lastimado, pero el jefe de la Comisaría interviniente lo desmintió. «Cuando se estaba por retirar del negocio fue abordado por cuatro sujetos encapuchados que a punta de pistola lo intimidaron y le exigieron la recaudación», clarificó el comisario Carlos Monges.
«Al repartidor le sustrajeron entre 5.000 y 9.000 pesos, además de la billetera, un celular y también le sacaron las llaves del vehículo», detalló. -¿Los delincuentes andaban en dos vehículos? Se le preguntó. «El no describió ningún vehículo, simplemente, lo único que pudo ver fue que salieron corriendo del lugar y después los perdió de vista», contestó Monges.
Negó seguidamente que el distribuidor de pollos haya sido golpeado y al consultársele si había podido describirle a alguno de los asaltantes recordó que los mismos estaban encapuchados al cometer el atraco. «Pero, presumiblemente eran cuatro personas mayores de los que solo uno tenía un arma de fuego», añadió y cuando se le preguntó si el hecho fue al voleo o tras haberlo seguido al repartidor, Monges afirmó: «No, se presume que lo venían siguiendo».
Recordó, seguidamente, que en ese lugar como en otros de la jurisdicción están los denominados «corredores seguros», en los que la policía incrementa la presencia cuando tiene la noticia de que va a andar algún repartidor.
Atraco en la fiambrería
La noche del viernes, al cabo de un día en el que hubo dos asaltos seguidos en Trelew, con una hora de diferencia, tal como se informó desde estas mismas páginas; dos ladrones encapuchados se llevaron la recaudación de una fiambrería a punta de pistola. Fue en un local comercial que hace un mes abrió sus puertas en la calle María Humphreys al 1200 al sudeste de la ciudad, detrás del parque industrial liviano.
Allí, por suerte, la situación no pasó a mayores, no hubo por fortuna heridos; y EL CHUBUT tuvo oportunidad de hablar con una de las víctimas: Con el hermano del dueño. El robo a mano armada tuvo lugar después de las 22.30 en un negocio llamado «Olaf III».
«Entraron encapuchados y uno nos apuntó: nos decía que nos quedemos quietos y nos pedían la plata», contó el hermano del dueño del comercio, que estaba con él y su mujer cuando llegaron los delincuentes.
«Vieron a mi cuñada y le pidieron la cartera, les pregunté qué más querían, les pedí que se fueran y lo hicieron; los estaba esperando un auto aparentemente un (Chevrolet) Corsa», añadió.
Más adelante mostrando su indignación por lo ocurrido se quejó y afirmó: «Esto es tierra de nadie», dijo, refiriéndose al barrio. «Los delincuentes se mueven como si nada por acá», agregó. ¿Y la policía anda, patrulla? Se le preguntó. «Sí, pero después de las diez de la noche acá no se ve a nadie. Yo trabajo en el remise y veo cómo se mueven los delincuentes. Pero, gracias a Dios no nos pasó nada; nos apuntaron sí…», admitió.
-¿Los dos estaban armados? Se le consultó entonces. «El que entró primero no sé si estaba armado pero el que nos apuntaba, nos decía que nos iba a tirar, que nos quedemos quietos», explicó.
Para la policía, este malviviente estaba armado con una «tumbera» y hablan de que él y el cómplice huyeron en un automóvil Chevrolet Corsa polarizado de color dorado al que dicho sea de paso todavía no pueden encontrar. Según las autoridades de la Comisaría Cuarta los asaltantes se alzaron con unos 3.000 pesos en efectivo.
Asalto en la peluquería
En medio de esta sucesión de asaltos y robos que ha habido en la ciudad, ayer, después del mediodía, dos jóvenes entraron a una peluquería y luego que uno sacara un cuchillo le robaron a la propietaria del lugar y a la mujer a la que le estaba cortando el cabello. A ambas les sustrajeron las carteras, los celulares y a una también los anteojos de sol. Posteriormente se dieron a la fuga del negocio, pero un agente que se encontraba en las inmediaciones los vio saliendo sospechosamente de la peluquería, los persigue y cuando fue anoticiado de lo ocurrido atrapó a uno de los individuos, el otro alcanzó a darse a la fuga.
El atraco había ocurrido después de las 13.30 en la peluquería «Anita» de avenida Colombia casi Rivadavia Norte y a uno de sus autores lograron atraparlo en Soldado Ortega casi Nicaragua, a cinco cuadras del lugar del hecho. El joven aprehendido tiene 21 años quedó preso a disposición de la fiscalía y en el sitio del procedimiento la policía recuperó parte de lo robado, además de incautar el cuchillo.
Con un televisor robado
A todo esto, ayer antes del mediodía en Urquiza y Abraham Mathews; en las inmediaciones de la Terminal de Omnibus, la policía demoró a un jovencito de 15 años que trasladaba un televisor Led de 32 pulgadas, del que después conoció que había sido robado de la casa de un militante político que está en Buenos Aires, participando activamente de actos y manifestaciones que se desarrollan por estas horas en Capital Federal, según refirió su ex pareja al ser interrogada por los investigadores.
Lo tristemente llamativo de esta historia es que del chico demorado nadie se quiso hacer cargo; ni su madre, y en consecuencia debió intervenir el Servicio de Protección de la Municipalidad que lo habría alojado en alguno de los hogares de menores que hay en la ciudad.
El Chubut