Balanza comercial energética. La balanza comercial del sector energético registró un superávit de 1.822 millones de dólares en el primer trimestre de 2025, según datos oficiales de la Secretaría de Energía.
El resultado positivo refuerza el rol del sector hidrocarburífero como generador de divisas, aunque en marzo se observaron cambios en la tendencia que podrían impactar sobre el saldo de los próximos meses.
De acuerdo con el informe difundido por la Secretaría, “esto es posible porque, con menos trabas al comercio exterior, el país exportó 753 millones en combustible y energía, mientras que importó 226 millones”. Sin embargo, durante marzo las exportaciones del sector cayeron 13,5% en comparación con el mismo mes del año anterior, debido a una combinación de menores precios internacionales (-5,4%) y una baja en los volúmenes exportados (-8,9%).
La cotización internacional del crudo Brent, que funciona como referencia para el petróleo argentino, se ubicó en torno a los 66 dólares por barril en los últimos días, por debajo del promedio registrado a comienzos de año. Según estimaciones de la consultora Economía & Energía, cada dólar de baja en el precio del barril implica una pérdida potencial de 100 millones de dólares en exportaciones energéticas.
En ese contexto, Aleph Energy proyectó que si el Brent se mantiene en el orden de los 60 dólares, el superávit energético estimado para 2025 podría reducirse en hasta 1.500 millones de dólares. A pesar de ese escenario, en marzo las exportaciones de petróleo crudo crecieron un 3,5% interanual. Por el contrario, las ventas externas de derivados registraron caídas: naftas (-51,7%), propano licuado (-60,3%), butanos licuados (-38,5%) y gas natural (-34,1%).
En paralelo, las importaciones energéticas subieron 71,6% en marzo respecto del mismo mes de 2024. Este aumento no se explicó por un alza de precios, sino por un mayor volumen importado. En particular, se destacaron las compras de gasoil por 119 millones de dólares, un producto que no había registrado importaciones en igual período del año anterior. También se incrementaron las compras de gasolinas, aunque en menor medida.
Según la consultora ABECEB, el superávit energético para todo 2025 podría reducirse a la mitad respecto a los 5.668 millones de dólares registrados en 2024, que fue el saldo más alto desde 2006. A su vez, se estima que el superávit comercial total del país pasará de 18.899 millones a cerca de 9.000 millones de dólares, en un contexto de corrección cambiaria gradual y mayores restricciones a las importaciones. Según publica ADNSUR.
El desarrollo de la infraestructura energética, como el proyecto Vaca Muerta Sur, será clave para sostener las exportaciones de petróleo no convencional. No obstante, el contexto internacional plantea desafíos. La OPEP recortó en 100.000 barriles diarios sus proyecciones de crecimiento de la demanda global de petróleo para 2025 y 2026, lo que implicaría una expansión anual del 1%. A esto se suma la continuidad de la guerra comercial entre China y Estados Unidos, que genera incertidumbre en los mercados y podría ejercer presión adicional sobre los precios de los hidrocarburos.