Las cámaras de seguridad fueron clave para reconstruir el ataque que terminó con la vida de Julián Ariel Navarro el 31 de octubre en Puerto Madryn.
La Justicia de Puerto Madryn dictó seis meses de prisión preventiva para Thiago Molina, acusado de asesinar a Julián Ariel Navarro durante una violenta agresión ocurrida el pasado 31 de octubre.
Según la información publicada por La17, el crimen fue registrado por cámaras de seguridad que muestran cómo el imputado persiguió a la víctima por varias cuadras antes de atacarla con un arma blanca.
La medida fue dispuesta por la jueza penal Patricia Reyes, a pedido del fiscal Juan Pablo Santos, quien argumentó la existencia de riesgos procesales que justifican la continuidad de la detención preventiva.
Las cámaras revelaron el recorrido y el momento del ataque
De acuerdo con los registros incorporados a la causa, Navarro intentó escapar tras una discusión, pero fue alcanzado nuevamente por Molina, quien se desplazaba en motocicleta.
El video muestra el momento en que el agresor intercepta el vehículo de la víctima y lo apuñala con un cuchillo de cocina tipo Tramontina.
La fiscalía confirmó que ambos jóvenes se conocían previamente y mantenían un conflicto desde 2023, lo que refuerza la hipótesis de que el crimen fue la continuidad de una disputa anterior y no un hecho casual.
Investigación y pruebas periciales en curso
Tras el ataque, Molina se entregó voluntariamente en la Comisaría Primera junto a su abogado defensor, Héctor Vargas, y decidió no declarar durante la audiencia judicial.
Los investigadores secuestraron prendas de vestir, teléfonos celulares y el arma blanca presuntamente utilizada, que serán sometidas a peritajes.
El cuerpo de Julián Navarro fue hallado dentro de su vehículo, a pocas cuadras del lugar de la agresión. Alcanzó a manejar unos metros antes de desvanecerse. Personal policial y médico constató su fallecimiento por una herida en el corazón.
El caso avanza bajo la figura de homicidio simple
La causa fue caratulada como homicidio simple, contemplado en el artículo 79 del Código Penal, que prevé penas de entre 8 y 25 años de prisión.
El plazo de investigación se fijó en seis meses, durante los cuales la fiscalía continuará reuniendo pruebas y testimonios para determinar la mecánica exacta del hecho.
Las autoridades remarcaron que las cámaras de seguridad fueron determinantes para esclarecer el recorrido del agresor y reconstruir con precisión los momentos previos al ataque.




