Un sector de gobernadores de distintas regiones del país avanza en la conformación de un interbloque propio para ganar peso específico dentro del Congreso.
La estrategia, que incluye mandatarios del Norte, la Patagonia y la región mesopotámica, apunta a fortalecer la representación provincial y equilibrar la balanza legislativa frente al Gobierno nacional. La información fue elaborada según informó C5N y puede consultarse en su sitio web.
Un armado federal para disputar protagonismo político
El encuentro político central se desarrolló en la Casa de Salta y reunió a Gustavo Sáenz (Salta), Osvaldo Jaldo (Tucumán), Rolando Figueroa (Neuquén), Hugo Passalacqua (Misiones), Raúl Jalil (Catamarca) y Gerardo Zamora (Santiago del Estero). En ese contexto, Sáenz confirmó que los mandatarios vienen trabajando desde hace tiempo en una agenda común fundamentada en las necesidades de las provincias.
La propuesta también busca sumar a los legisladores del espacio Coherencia, integrado por ex libertarios que se alejaron del oficialismo. Con esta convergencia, los gobernadores aspiran a construir una tercera fuerza capaz de influir en el avance de los proyectos enviados por el Ejecutivo.
Un escenario legislativo en movimiento y con matices internos
Mientras algunos mandatarios avanzan hacia la idea de un interbloque amplio, otros expresaron cautela. Jaldo aclaró que sus legisladores mantendrán su pertenencia al bloque Independencia, aunque no descartó coordinar acciones conjuntas en un esquema interbloqueado.
Figueroa, por su parte, fue más contundente: anunció que sus representantes conformarán un bloque propio —La Neuquinidad— aunque continuará articulando posiciones con los demás gobernadores para defender intereses comunes.
La movida también despertó comparaciones con experiencias previas como Provincias Unidas, aunque los mandatarios insisten en que este armado tiene una naturaleza distinta, más enfocada en las necesidades territoriales y en la negociación directa con el Ejecutivo y con los bloques tradicionales.
El rol de los mandatarios que se mantienen en silencio
Entre las miradas atentas está la del catamarqueño Raúl Jalil, quien optó por no realizar declaraciones públicas. Sin embargo, su nombre aparece en el centro de las especulaciones internas: mientras desde Unión por la Patria intentan retenerlo, señales recientes indican que mantiene conversaciones con la Casa Rosada y evalúa el destino de los cuatro diputados que responden a su conducción.
Sáenz también incluyó en las conversaciones al rionegrino Alberto Weretilneck, aunque a partir del 10 de diciembre no contará con representación legislativa directa. Pese a ello, su figura conserva relevancia dentro del ajedrez federal.




