La Intendenta de Rawson estuvo en el acto desarrollado este martes en el Centro Cultural “José Hernández”. Destacó el “excelente” trabajo que hace la institución para “formar alrededor de 700 alumnos anuales que tienen la posibilidad de tener un oficio y una salida laboral”.
La intendenta Rossana Artero acompañó este martes la entrega de certificados en distintos oficios que, en el cierre del cuatrimestre, llevó adelante el Centro de Formación Profesional Número 650 de Rawson, en el Centro Cultural Municipal “José Hernández”. Fueron casi 350 las personas que egresaron de distintos cursos que cuentan con interesantes salidas laborales.
“Estuvimos acompañando la entrega de diplomas del Centro de Formación Profesional, que cumplió 25 años en la ciudad y es excelente el trabajo que hace para formar alrededor de 700 alumnos anuales de distintas edades que tienen la posibilidad de tener un oficio y una salida laboral”, destacó Artero consultada por la prensa luego del acto, en el que estuvieron presentes los egresados con sus familias, además de las autoridades de la institución que encabeza el director, Mauro Corvalán.
Artero aprovechó para agradecer “la colaboración permanente que tenemos con el Centro de Formación Profesional, con capacitaciones y el trabajo en conjunto que se hace con la Municipalidad”.
En este contexto Artero dijo que la comunidad educativa espera “ansiosamente que puedan contar con su propia sede porque se hace dificultoso funcionar en distintos lugares como lo hacen hoy”.
“Por lo pronto ya tienen su terreno cedido por la Municipalidad y estamos esperando que empiecen con la construcción de su propio edificio”, que fue licitado el año pasado por parte del Gobierno de la Provincia.
En tanto, el director Corvalán agradeció a la Intendenta por su presencia en el acto y dijo que fue “un día muy feliz para nosotros, con casi 350 egresados en un nuevo cuatrimestre muy intenso, con todo un equipo de gestión nuevo”.
Corvalán puso en valor que la institución tiene “un promedio anual de inscriptos que ronda los 800 alumnos, con una matrícula de unos 650”.
Precisó que “los que recibieron certificados fueron de cursos de herrería, carpintería, instalaciones sanitarias, montadores gasistas, informática, entre otros. En este cuatrimestre tuvimos 36 cursos, contando las ofertas formativas que dispusimos dentro de contextos de encierro, ya que estamos con capacitaciones en la Unidad 6”.
Acerca del perfil de los estudiantes explicó que “las edades rondan entre los 20 y los 70 años” y que “el grueso es entre los 25 y los 35 años”.
“Normalmente vienen porque necesitan hacer algo más, mucha gente necesita cambiar de rubro, otros por gusto, por hacer algo nuevo o desarrollo un hobby. Hay muchos chicos y mujeres que se han sumado en carpintería, por ejemplo”, graficó.
Y concluyó: “Afortunadamente un gran porcentaje de los que egresan continúa trabajando. Algunos han logrado entrar en alguna empresa, en algunos casos han hecho pasantías en Turismo en el municipio. Es decir que se cuenta en serio con una salida laboral”.