Se lo entregó Alfredo Olmos, integrante del Servicio de Protección de Derechos de la Municipalidad que dicta un taller en el Centro de Día y en el que se hacen ese tipo de producciones.
La intendenta Rossana Artero recibió por parte de Alfredo Olmos, operador del Servicio de Protección de Derechos de la Municipalidad de Rawson, el primer porta mate realizado con estampado de imágenes de Rawson y que es producto del taller que dicta en el Centro de Día de Rawson.
«Le hicimos a la Intendenta un presente de parte del taller que dicto en el Centro de Día de Rawson. Se hace dos veces por semana, es abierto a la comunidad y hacemos bolsos materos y otras cosas como portacosméticos y elementos deportivos de manera artesanal para equipos de la zona», dijo Olmos tras visitar a Artero.
En este caso «realizamos un porta mate con un estampado de la imagen de Rawson. Confeccioné un bolso con imágenes atractivas y características de la ciudad, como Playa Unión, el Puente del Poeta, entre otras. Lo pudimos plasmar, fue el primero y se lo entregamos a la Intendenta para que ella lo pueda tener. Vamos ampliando cada vez más el espacio y sumando ideas, porque no hay límites para crear», indicó.
«Entregárselo a la Intendenta fue algo simbólico, como autoridad máxima de la ciudad, y para nosotros es un placer que se conozca el trabajo del Centro de Día de Rawson», agregó.
El taller «es un espacio gratuito. Estamos los lunes y miércoles de 14 a 16 horas. Aquellos que quieran concurrir se pueden acercar. Las puertas están abiertas para que puedan hacer el curso».
El espacio «fue destinado en primer lugar a los pacientes y lo abrimos luego a la comunidad. Ya van a hacer dos años que estamos y han pasado más de 90 personas, algunas de las cuales siguen trabajando en sus casas. El Centro de Día está en Cardenal Cagliero 65, a metros del Puente del Poeta, donde la gente puede concurrir a consultar de 8 a 17 horas», precisó Olmos.
El operador del Servicio de Protección de Derechos dijo que se trabaja en este tipo de elementos personalizados «por ejemplo, con estampados vinculados a la familia por algún aniversario, o un presente por una fecha especial. Le da otra impronta a un elemento que se puede conseguir en otros lugares, pero en este caso con un valor agregado y a un precio económico, hecho de manera artesanal».
Además, Olmos resaltó que «también puede ser una salida laboral para la gente que participa del taller y después puede vender el bolso».
Puso como ejemplo que «hace poco participaron dos hermanos adolescentes que confeccionaron un par de bolsos, se los vendieron a la familia y luego participaron de una feria que se hizo en una escuela. Se hicieron un stand en compañía de sus papás y de esta manera pueden generar un ingreso adicional para ayudar a los estudios. Porque nosotros siempre les decimos que lo principal es el estudio, que eso les va a dar una salida laboral estable en el futuro, pero mientras tanto pueden desarrollar esta actividad».