El candidato del Frente de Todos y Cristina Kirchner denunciaron la persecución a dos dirigentes ecuatorianas.
Inesperadamente, Alberto Fernández marcó otra diferencia con Mauricio Macri en política exterior. Este martes se solidarizó en sus cuentas de redes sociales con dos dirigentes opositoras al presidente Lenín Moreno, un dirigente al que apoya el gobierno argentino junto al Grupo de Lima.
«Veo con mucha preocupación los graves hechos que se viven en Ecuador y la persecución política y judicial que están sufriendo dos mujeres jóvenes que son referentes de la oposición política», tuiteó primero Fernández, y luego agregó: «Me refiero a Gabriela Rivadeneira, que solicitó asilo en México, y a Paola Pabón, prefecta de Pichicha, detenida desde la madrugada del lunes. No podemos no observa este tipo de violaciones al Estado de Derecho en la región». Con el mensaje, el candidato del Frente de Todos publicó las fotos de las dos mujeres.
A su vez, Cristina Kirchner, la candidata a vice de Fernández, tuiteó en la misma línea. «La democracia tiene nombre de mujer y en Ecuador está presa. Libertad a Paola Pabón,prefecta de Pichincha, presa y Gabriela Rivanedeira, asilada. Mujeres, jóvenes, comprometidas y votadas por su pueblo», escribió la candidata a vice.
La crisis en Ecuador tomó otra dimensión en las últimas horas, cuando se retomó el diálogo entre el gobierno de Moreno y la Confederación Nacional de Indígenas del Ecuador. Moreno dio marcha atrás con el decreto que eliminaba los subsidios al combustible -lo que conllevaba una suba de más del 120 por ciento- y los dirigentes indigenistas dieron fin a sus 12 días de violentas protestas.
Sin embargo, lo que no se detuvo fue la escalada de conflicto entre Moreno y el ex presidente Rafael Correa. Hoy enemigos, el primero fue vice del segundo. Moreno acusa a Correa de promover un golpe en Ecuador, y la justicia mantiene un pedido de prisión preventiva contra el ex mandatario por supuestos delitos de corrupción. Correa pidió la renuncia de Moreno, y este acusa a Nicolás Maduro de actuar en su contra junto al ex presidente.
Rivadeneira fue presidenta de la Asamblea Nacional ecuatoriana y una de las dirigentes más cercanas a Correa. El 12 de octubre ingresó a la embajada de México en Ecuador, aduciendo que las fuerzas del orden le estaban haciendo un seguimiento extrajudicial.
Fuerte crítico de Maduro, Macri apoyó en esta revuelta a Moreno pero evitó criticar a Correa, a quien conoce de hace años. La crisis de Venezuela se coló en el debate, pero sólo el candidato del FIT, Nicolás del Caño, habló de Ecuador. Más bien, pidió un minuto de silencio.
En Quito, la embajada de México dijo que había dado protección a otros tres políticos opositores ecuatorianos «para brindarles protección y resguardo». Son Luis Fernando Molina, asambleísta alterno nacional; Soledad Buendía, asambleísta nacional; Carlos Viteri, asambleísta nacional, y sus cónyuges».
Entre tanto, Pabón se encuentra detenida con prisión preventiva por orden de un juez de la Corte Provincial de Justicia de Pichincha, de donde la mujer es prefecta (gobernadora). La Fiscalía General del Estado informó que el juez formuló cargos contra ella y otros dos procesados por el presunto delito de rebelión durante las protestas, y que la instrucción fiscal se prolongará noventa días.
Pero Pabón denunció por su parte que el allanamiento se produjo en su domicilio de madrugada y que «derribaron la puerta mientras dormía», al tiempo que aseguró que la detención se practicó «sin pruebas».
Rivadeneira dijo en una carta «En lo personal, he padecido un seguimiento judicial en los últimos días, con agentes de la DGI (Dirección General de Inteligencia), carros de la policía, militares y civiles frente a mi domicilio, mi despacho y mis espacios de militancia», informó El Clarín.