El ex jefe de la flota de submarinos, capitán de navío Claudio Villamide formuló esta expresión a mediodía de este jueves, en el marco de la audiencia de alegatos (tanto virtual como presencial) convocada por la Cámara de Apelaciones de Comodoro Rivadavia por la causa de la tragedia del submarino ARA Juan, la cual tiene como punto central de encuentro el Centro Cultural del municipio de esta misma ciudad.
Presidida por el titular de ese tribunal de alzada, Javier Leal de Ibarra, el primer expositor fue el abogado Juan Pablo Vigliero quien al igual que su defendido, Villamide, se encuentran presentes en la sala de audiencias y ambos casos intentaron refutar la resolución de la jueza Federal de Caleta Olivia, Marta Yáñez, quien procesó e imputó el delito de estrago culposo a seis oficiales de la Armada , responsabilizándolos de la tragedia, aunque no les dictó prisión preventiva.
Al final de sus alegatos, Vigliero solicitó y tuvo el consentimiento del tribunal que se completa con Hebe Corchuelo de Huberman (por zoom) y Aldo Suárez (presente en la sala),para que pudiera exponer su defendido Claudio Villamide.
El marino, que luce un informe azul de la Armada, utilizó una pizarra para dar explicaciones al tribunal sobre la estructura y compleja operatividad de un submarino y sobre el final, a modo de procurar convencer a los magistrados de su inocencia en las imputaciones que hizo la jueza Yañez tanto a él como a sus camaradas de rangos superiores, pronunció encendidas frases de defensa.
Entre otras cosas reparó que “se nos ha dicho que somos desaprensivos, pero sepan que todos nosotros tenemos conocidos” entre los hombres y mujeres de la fuerza y personalmente él había tenido estrechas relaciones de amistad con gran parte de los 44 tripulantes del ARA San Juan trágicamente fallecidos.
Por ello resaltó que quería recordarle al tribunal que lo escuchaba que los hombres de la Armada están capacitados para cumplir conmisiones altamente profesionales que a veces son difíciles de llevar a cabo y tienen siempre presente que hay riesgos -como ser en una situación de conflicto-, lo que los puede llevar a “dar la vida por su país”.
Fue entonces que dejó en claro que “nosotros no fuimos preparados para matar a nuestra propia gente”, dando a entender que el trágico naufragio fue por un imprevisto evento en una misión de servicio y no por negligencia de mandos superiores.
Vale recordar que la audiencia comenzó minutos después de las diez de la mañana y alrededor de las 13:30 pasó a un cuarto intermedio.