El 6 de enero a la madrugada llegan los Reyes Magos, pero pese a conservar la tradición de generación en generación, poco sabemos de su historia.
¿Por qué el 6 de enero?
En el siglo V se comenzó a identificar esta fecha con la Adoración de los Reyes Magos debido a que ese día se celebraba la revelación de Jesús al mundo no judío (Epifanía). En otras culturas se realizaba la fiesta del solsticio de invierno en esa fecha.
¿Cómo se celebra en otros países?
En 1855 en Barcelona se comenzó a realizar el desfile de carrozas. La cabalgata de los Reyes Magos como se denominó se celebra el 5 de enero por la tarde en países como España, Andorra, República Checa, Polonia y algunas localidades de Portugal y México.
Orígenes de sus nombres
Sus nombres aparecen por primera vez en textos del siglo V como Melichior, Gathaspa y Bithisarea y Melkon, Gaspard y Balthazar. Un siglo después, en la iglesia de San Apolinar Nuovo (Rávena, Italia) aparecen sus figuras y los nombres que hoy todos conocemos: Melchor, Gaspar y Baltasar.
Magos pero no reyes
En Oriente se definía Magos a los sabios, quienes tenían un conocimiento superior y sabiduría pero en ningún momento en la Biblia mencionan su condición de monarcas. Al parecer el padre de la iglesia del siglo III, Quinto Séptimo Tertuliano, les dio la condición de reyes debido a una interpretación de un salmo bíblico.
¿Tres, cuatro o doce, cuántos eran?
No existe confirmación sobre cuántos eran. Según otras tradiciones como la armenia, podrían haber sido siete o doce. También, existen leyendas que hablan de un cuarto Rey Mago, Artabán. Este habría llegado tarde a Judea por curar a un viejo moribundo y habría sido apresado y encerrado durante 30 años.
El que estableció el número tres fue el papa León I, debido a que los regalos al Mesías eran tres: oro, incienso y Mirra.