La Organización Panamericana de la Salud (OPS) dijo este miércoles que la variante Ómicron del coronavirus ya fue detectada en seis países de América, y llamó a las personas a vacunarse y a redoblar las precauciones para evitar nuevas infecciones.
Argentina, Brasil, Canadá, Chile, México y Estados Unidos reportaron casos de la nueva cepa, señaló en rueda de prensa la directora de la OPS, Carissa Etienne, y advirtió que es solo «cuestión de tiempo» que circule en otros países.
«La llegada de una nueva variante no significa necesariamente que las cosas vayan a empeorar, pero sí significa que debemos estar más atentos», afirmó, según la agencia de noticias AFP.
Los datos preliminares indican que Ómicron, reportada por primera vez por Sudáfrica el 24 de noviembre, puede reinfectar más fácilmente que las variantes anteriores a quienes ya han tenido coronavirus o fueron vacunadas, pero también podría causar una enfermedad más leve, según sostuvo hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Etienne destacó que Delta sigue siendo la variante de preocupación predominante, pero alertó que todas pueden provocar enfermedad grave o muerte, por lo cual pidió no bajar la guardia con las medidas de prevención, en especial durante las fiestas de fin de año.
Los casos de coronavirus aumentaron la semana pasada en Canadá y zonas de México, como Baja California, así como en Panamá, Trinidad y Tobago y otras islas pequeñas del Caribe.
En Sudamérica, Bolivia, Perú y Colombia siguen experimentando un incremento constante de los contagios.
Ante esto, Etienne llamó a acelerar los esfuerzos de vacunación en la región, donde 20 países aún no lograron el objetivo fijado por la OMS de inmunizar al 40% de su población antes de fin de año.
Según la OPS, al ritmo actual, es posible que hasta seis países -Haití, Jamaica, San Vicente y las Granadinas, Guatemala, Santa Lucía y Granada- queden rezagados.
«La situación más preocupante es en Haití», dijo el subdirector de la OPS, Jarbas Barbosa, y deploró una cobertura vacunal «muy baja» debido a la crisis política y al terremoto que sacudió este año a ese país caribeño, el más pobre de América.
La OPS insistió en que los grupos más vulnerables, como los ancianos, las personas con enfermedades preexistentes y los indígenas, deben ser prioridad en las campañas de vacunación para evitar muertes y un colapso de los sistemas sanitarios.