El abogado querellante Facundo Bonavita, representante de la familia de Elías, aseguró que el violento incidente ocurrido en Puerto Madryn fue consecuencia directa de una decisión judicial que “despertó enojo y frustración en la sociedad”.
La jueza a cargo del caso resolvió mantener la prisión domiciliaria del imputado, pese a las pruebas que demostraban que había incumplido las condiciones impuestas.
“El acusado tenía prohibido recibir visitas y lo hizo. La comisaría informó la violación de esa medida y aún así no se revocó la prisión domiciliaria”, explicó Bonavita en diálogo con El Quinto Poder por #LA17. La madre de Elías, acompañada por el letrado, había solicitado formalmente que el detenido fuera trasladado a un centro carcelario.
El abogado precisó que el imputado había recibido visitas el 28 de octubre, apenas dos días antes de la audiencia donde se planteó el pedido de revocación. “Era una falta grave y debió tener consecuencias. La jueza decidió minimizar el hecho y eso generó indignación en los familiares y vecinos”, afirmó.
El reclamo de justicia derivó horas después en un grave episodio frente a la vivienda del detenido, donde se produjeron disturbios y resultaron heridas dos mujeres policías. Según el relato del abogado, la concentración comenzó de forma pacífica, pero se desbordó cuando algunos manifestantes encendieron cubiertas y un sillón en la vía pública
“Lamentamos profundamente lo que sucedió, especialmente por las agentes que fueron lesionadas mientras cumplían con su trabajo”, expresó Bonavita. También aclaró que no se encontraba en el lugar durante los hechos, pero mantuvo contacto con la madre del niño fallecido, quien confirmó que “el reclamo inicial era pacífico y se desvirtuó por completo”.
La fiscalía dispuso una serie de allanamientos y detenciones vinculadas al ataque, mientras que las fiscales avanzan con la recolección de testimonios y pericias para determinar la responsabilidad penal de los involucrados.
El caso que originó el conflicto se relaciona con la muerte de un niño de tres años, hijo del imputado, en un siniestro vial ocurrido mientras este conducía alcoholizado. El acusado enfrenta cargos por homicidio culposo doblemente agravado, dado que manejaba con 1,99 gramos de alcohol en sangre y sin utilizar la silla infantil reglamentaria.
“Nuestro pedido es claro: queremos justicia por Elías. No buscamos venganza, pedimos que se cumpla la ley”, sostuvo Bonavita. El abogado recordó que la prisión domiciliaria se había otorgado “en condiciones excepcionales” y que cualquier incumplimiento debía implicar su inmediata revocación.




