Brasil, confiado en tener la vacuna de Oxford lista para diciembre, roza ya las 90.000 muertes por el nuevo coronavirus, una pandemia que desde finales de mayo ha dejado un promedio de 1.000 decesos diarios y amenaza con agravarse en las regiones del sur con la llegada del invierno austral.
Según informó este martes el Ministerio de Salud y sin los datos consolidados del estado de Pará (norte), que deberán ser actualizados el miércoles, Brasil registró en las últimas 24 horas 921 nuevas muertes por COVID-19, con lo que el total de víctimas ya suma 88.539 fallecidos