Durante la última semana se vivieron días de profundo dolor y enojo en la provincia. En Comodoro, se conoció el caso de abuso sexual infantil en el Jardín N° 406, que desató reclamos en el casco céntrico. En Puerto Madryn, el «Monstruo» fue condenado: se trata de un hombre de 41 que abusó durante años de su hijastra. Ambos reclamos ponen en escena la necesidad de revisar el cumplimiento de los derechos de protección de las infancias. Por su parte, la comunidad de Pueblos Originarios sigue luchando en contra de la violencia sexual de las niñas y mujeres de sus comunidades: esta semana se reportó un intento de femicidio cuya víctima fue una niña de 12 años. En el plano legislativo, se logró avanzar en la Cámara Baja con el proyecto que prevé la creación de una lista de deudores alimentarios.
Días de dolor y furia en Comodoro: más de 30 denuncias por abuso sexual en un Jardín
Los pedidos de justicia comenzaron el miércoles 9, con al menos diez denuncias que apuntaban al docente de música del establecimiento. Actualmente las denuncias ascienden a 42, pero se presume que podría haber más. El profesor estaba a cargo de más de 100 niños de 3 y 5 años.
El jueves los padres se reunieron en la Fiscalía de Comodoro Rivadavia y cortaron la ruta hacia los kilómetros. El lugar estaba custodiado con una fuerte presencia policial y en las paredes del organismo se leían frases como «Violador muerto no viola», «La Justicia cuida a los violadores» y «¿Cuántas denuncias son suficientes?».
El docente también trabajaba en la Primaria Nº 169 y en el Instituto Superior Nº 806. En este último establecimiento, los estudiantes realizaron una sentada en repudio al accionar del acusado. Fue separado de todos sus cargos.
El viernes, alrededor de 2500 personas marcharon por el centro de la ciudad bajo la consigna «Los niños no se tocan». Si bien por el momento cesaron los cortes de ruta y los reclamos en fiscalía, no descartan nuevas acciones la próxima semana en caso de no ser escuchados.
«Quieren hacernos un acta, no quieren que hagamos nada para no manchar el prestigio del jardín. Además, quieren que los chicos sigan viniendo para no perder su escolaridad, y que el docente siga trabajando», relató una de las madres denunciantes. Y agregó: «Le tienen terror al baño, la mitad de la sala se empezó a hacer pis y no se querían quedar en el jardín. Todo comenzó a través de un juego».
Los padres sostienen que el equipo directivo del Jardín N° 406 tenía conocimientos sobre los hechos e hizo «caso omiso» a los reclamos. La Fiscalía explicó que trabaja lo más rápido posible en la recolección de evidencia para avanzar con el caso.
«El Monstruo» podría ser condenado a la pena máxima por abusar durante seis años de su hijastra
Un hombre de 41 años fue condenado en Puerto Madryn por «abuso sexual con acceso carnal, producción de material de abuso sexual infantil, corrupción de menores y reducción a la servidumbre» de su hijastra menor de edad. Es la primera vez que se logra este tipo de calificación legal y podría recibir la mayor pena prevista en el Código Penal argentino.
Los hechos comenzaron en 2010 en la provincia de Buenos Aires y continuaron en Puerto Madryn, donde se radicó la familia. En 2016, con 15 años, la joven debió realizarse un aborto bajo el protocolo de Interrupción Legal del Embarazo.
«La forma de procurar esta reducción fue a través de la intimidación y amenazas. La conducta del imputado cesó ante la amenaza de la joven en realizar la denuncia, que luego finalmente logró concretar», sostuvo la fiscal Vottero.
El hombre está acusado de «abuso sexual con acceso carnal agravado por la convivencia en la modalidad de delito continuado en concurso con abuso sexual con acceso carnal en concurso con producción de imágenes de explotación sexual infantil en concurso con corrupción de menores agravada en concurso con reducción a la servidumbre».
La próxima semana se llevará adelante la audiencia para pedir la pena. Se especula que tendría que cumplir 30 años, la pena máxima establecida por el Código Penal para cualquier tipo de delito.
Las infancias indígenas siguen en peligro: intento de infanticidio en Salta
«Este mensaje es urgente y gravísimo. Porta nuestro indescriptible dolor. Una vez más, una de nuestras hijas de tan sólo 12 años, en la provincia de Salta, perteneciente al pueblo wichí, ha sido violada y estrangulada. Ahora pelea por su vida. Está internada en grave estado», describe la weychafe Moira Millán en un audio que envió a la comunidad para denunciar la brutal violencia racista e institucional que se erige contra las infancias indígenas.
La niña, perteneciente a la comunidad Bajo Grande de Santa Victoria, se encuentra internada en el Hospital Juan Domingo Perón desde el pasado jueves. Fue atacada por su primo, quién actualmente se encuentra detenido. «Estamos esperando que la Justicia nos informe qué hicieron. Según mi hermano que quedó en Alto La Sierra, ya detuvieron al chico. No sé su edad, solo sé que es menor», explicó su padre, Gustavo Mendoza.
La víctima vivía en condiciones de gran vulnerabilidad, y no es la primera víctima de violencia sexual e intento de femicidio en la región.
Millán se refirió al contexto de extrema violencia que sufren hoy las infancias indígenas, especialmente las niñas: «Una hija a la que no conozco, una hija que merece jugar, ser feliz, una hija en un país racista y criminal, que está permitiendo, con su indiferencia, la multiplicación de muertes sobre nuestras niñeces. Un país que está de acuerdo con el genocidio, que no se conmueve ante nada, ni aún cuando las balas asesinas provenientes del Estado disparan contra las niñeces originarias».
La weychafe también pidió por el bienestar de los hijos de las mujeres mapuches detenidas durante el operativo en Villa Mascardi, que continúan con prisión domiciliaria: «Aún hoy, permanecen recluidos, junto a sus madres, todos muy pequeños, incluso bebés, nacen sabiendo lo que es la cárcel por el simple hecho de ser mapuches y querer vivir en territorio como tales. Sus madres son judicializadas»,
Todos callan el genocidio, todos lo habilitan», sostuvo Millán: «El presidente con su firma, la vicepresidenta con su indiferencia, una inmensa mayoría del pueblo argentino con su indolencia. Los grandes medios hegemónicos, con sus mentiras racistas. Todes avalan. El país amanece una y otra vez como si nada, pero el grito desesperado de aquella niña wichí, potente, llegó hasta nuestros oídos y corazones, y nos ha empujado a salir para exigir que se termine».
Se pregunta, finalmente: «¿Cuántas niñas más tienen que ser violadas y asesinadas? ¿Cuántas serán suficientes para que despierte este país?»
El proyecto que busca crear una lista de morosos alimentarios fue aprobado en Diputados
El pasado 9 de noviembre, La Cámara de Diputados aprobó el proyecto de ley que propone la creación de un Registro Nacional de Deudores Alimentarios Morosos (ReNDAM) con el objetivo de conformar una base de datos nacional que permita sancionar a los progenitores que no cumplan con las cuotas que deben abonar para la manutención de sus hijos. La demanda fue impulsada, en parte, por sectores feministas que abogan por el cumplimiento de los derechos parentales.
La iniciativa se probó casi por unanimidad: 225 votos a favor contra un voto en contra, el de José Luis Espert (Avanza Libertad) quién sostuvo que es un proyecto «institucional» porque tiene carácter procesal y debe ser competencia exclusiva de las provincias.
Quienes figuren en la lista no podrán renovar su registro de conducir, pasaporte, abrir locales comerciales, participar de espectáculos deportivos o ir a casinos, entre otras actividades.
«El incumplimiento de la obligación alimentaria vulnera los derechos de niñeces. Es un delito no ejercer la responsabilidad parental. Nuestros hijxs no se alimentan del aire. La mujer tiene que si o si acarrear con esa responsabilidad mientras el hombre lo evita sin consecuencias», tuiteó la diputada Jimena López (Frente de Todos).
Para Roxana Reyes (UCR), el proyecto además protege a las mujeres que sufren violencia de género y deben «deambular por los juzgados en juicios que duran muchos años»: «Quiero pedirles a los jueces que dejen la burocracia de lado: les estamos dando una herramienta inigualable para que puedan combatir este delito. No busquemos garantías para proteger a los deudores alimentarios».
Pese al panorama pesimista para los niños, niñas y adolescentes de este país, esperan que el proyecto pueda avanzar en la protección de los derechos de las infancias.