Entre toda la vida animal para descubrir en territorio argentino, hay una especie de ave que vive en la región patagónica y despierta mucha simpatía en niños y adultos: el pingüino. Y es más: según la zona se pueden identificar subespecies, como el Emperador o el de Magallanes, entre otras. Hoy se celebra el Día Mundial del Pingüino y Ushuaia, en Tierra del Fuego, Santa Cruz y localidades de Chubut como Puerto Madryn y Punta Tombo son los lugares principales para encontrarlos en su hábitat natural.
Desde la Provincia de Santa Cruz, preparan una agenda de actividades que cruza ciencia, arte, educación ambiental y juego. Hoy desde las 15 horas, en el auditorio de la Secretaría de Turismo, se desarrollarán charlas y actividades organizadas por distintas instituciones provinciales y organizaciones que trabajan por la conservación marina, señaló Río Negro.
“La idea surgió charlando con Ana, de Fundación Por el Mar (PEM) —cuenta Marisol Espino, encargada de Áreas Protegidas del Consejo Agrario Provincial—, sabiendo que se venía esta fecha tan especial. Pensamos que era importante hacer algo juntas para destacar el valor de las especies autóctonas y el rol de las áreas protegidas”.
El evento será una invitación abierta a conocer más sobre el pingüino, una especie carismática y sensible que forma parte de la identidad santacruceña, especialmente en localidades costeras como Puerto Deseado, San Julián o la misma capital provincial.
Mirar al mar, volver al origen
“Nos pareció clave poder darle relevancia a este día —explicó Ana Fernández, referente de PEM — porque Santa Cruz es un lugar privilegiado para ver pingüinos. Queremos que la gente no solo sepa que puede disfrutar de su avistaje, sino que también aprenda cómo cuidarlos, por qué son importantes para el ecosistema y cómo debemos comportarnos cuando compartimos territorio con ellos”.
La jornada comenzará con un ciclo de charlas científicas y divulgativas, entre ellas una a cargo del Parque Interjurisdiccional Marino Makenke, otra de la UNPA a través de la carrera de Ingeniería en Recursos Naturales, una presentación del Consejo Agrario Provincial y una exposición del guía de turismo Sebastián Alvarado sobre las especies que habitan en la provincia.
Luego, desde las 17, se abrirá una muestra de arte titulada Portuaria, nacida de un taller de collage impulsado por la Fundación Por el Mar y la Secretaría de Estado de Cultura. “La muestra refleja nuestra identidad costera, marina y santacruceña —contó Ana—. Hay Macá tobianos, lobos marinos y, por supuesto, pingüinos. Es un trabajo hermoso que merecía ser compartido con la comunidad”.
Jugar para aprender
Además del arte, habrá juegos y propuestas lúdicas para toda la familia, a cargo de la Asociación Ambiente Sur, la Secretaría de Estado de Ambiente y otras organizaciones participantes. “A veces la gente no es del todo consciente del impacto que tiene su comportamiento con el entorno —explicó Marisol—. Caminar sobre un nido, pasar con una moto por la playa o alterar una zona de cría puede ser devastador para una especie tan vulnerable como el pingüino”.
En ese sentido, destacó la importancia de las áreas protegidas “que no solo preservan espacios naturales, sino que educan, invitan a reflexionar sobre cómo ajustamos nuestra conducta para no dañar la naturaleza”.
La Global Penguin Society, que este año por primera vez colabora con el Consejo Agrario, también dirá presente con material lúdico, educativo e informativo: libritos, videos, juegos y otras herramientas para seguir acercando la ciencia a grandes y chicos.
Voluntariado en Cabo Vírgenes
Como cierre de la jornada, se realizará un anuncio muy esperado: el lanzamiento oficial del voluntariado ambiental en la Reserva Provincial Cabo Vírgenes, con tareas de reacondicionamiento del sendero, cartelería, limpieza y mejora de infraestructura.
“Queremos aprovechar ahora que los pingüinos ya se fueron para trabajar rápido, antes de que nos agarre el invierno —adelantó Marisol—. Necesitamos más manos, así que vamos a abrir la convocatoria. Es un proyecto liderado por el CAP con apoyo de la UNPA, y nos entusiasma muchísimo”.
La actividad contará con cine continuo, proyecciones del concurso fotográfico sobre pingüinos, elección de ganadores, sorteos y sorpresas.
Un encuentro pensado para aprender, celebrar, jugar y, sobre todo, recordar que el mar también es parte de lo que somos. “Hay un objetivo común que nos une —cerró Ana—: dejar de darle la espalda al mar. El pingüino es parte de nuestra identidad. Y este viernes vamos a celebrarlo como se merece”.
Información de Agencia El Rompehielos: Proveedora de noticias e información sobre asuntos ecológicos, ambientales y culturales de la Patagonia y la Antártida Argentina
Pingüinos de Magallanes en Puerto Madryn
Los Pingüinos de Magallanes comienzan a hacer su desembarco en las costas de Chubut en septiembre y se quedan hasta mediados de abril, porque durante estos meses, deben cumplir el ciclo de reproducción, nacimiento, aprendizaje e independencia de los jóvenes.
Son eficientes en el mar pero deben salir del agua para poner los huevos y criar a sus pichones en la primera etapa de sus vidas. El arribo de todo el grupo durará todo este mes. Los machos eligen el nido que dejaron el año anterior y comienzan a acicalarlo para recibir a las hembras. Hasta octubre transcurren los cortejos y cópulas y los primeros pichones nacen en noviembre.
Durante todo el verano los adultos invierten tiempo y energías en alimentar a sus pichones, que para mediados de marzo ya estarán listos para ingresar al mar por primera vez y buscarse su propio alimento.
Hasta mediados de abril se pueden ver en sus colonias, luego migran hacia el norte buscando comida.
Dónde ver a los Pingüinos de Magallanes
La reserva de Punta Tombo, ubicada a 180 kilómetros al sur de Puerto Madryn, es hogar de más de un millón de ejemplares. Muestra para esta temporada el «Sendero de la Pingüinera», que posee 3 kilómetros de ida y vuelta, con diferentes miradores para observar, fotografiar y disfrutar del paisaje.
Otra colonia de pingüinos se encuentra en la Estancia San Lorenzo, en Punta Norte, en el noreste de la Península Valdés, donde hay una reserva que también ofrece experiencias adicionales, como senderos auto – guiados y la oportunidad de conocer la flora y fauna local. La Estancia San Lorenzo ofrece alojamiento y funciona un restaurante.
También se los puede encontrar en el mirador de Punta Cantor en Caleta Valdés o en la colonia más nueva, ubicada en Punta Ninfas que se tiene acceso a través de la Estancia “El Pedral”, a 70 km de Puerto Madryn.