El presidente electo Rodrigo Paz confirmó el reacercamiento diplomático con Washington, marcando un giro histórico en la política exterior boliviana tras casi dos décadas de distanciamiento.
En su primera conferencia de prensa como mandatario electo, Rodrigo Paz anunció oficialmente que su gobierno reanudará las relaciones con Estados Unidos. El centrista de 58 años confirmó: «Hemos estado dialogando especialmente con el gobierno de Estados Unidos. Creo que esto es muy importante». Este movimiento representa un cambio radical en la política exterior que Bolivia mantuvo durante los gobiernos del MAS.
El Origen de la Ruptura Diplomática
Las relaciones entre ambos países se encuentran rotas desde septiembre de 2008, cuando el entonces presidente Evo Morales expulsó al embajador estadounidense Philip Goldberg, acusándolo de apoyar una conspiración de derecha contra su gobierno. En aquel momento, Morales también retiró del país a la DEA y a la agencia de cooperación Usaid. Washington respondió con una medida recíproca, echando al embajador boliviano, y desde entonces no hubo relaciones diplomáticas formales entre las dos naciones.
El Contexto del Cambio de Rumbo
Paz, quien ganó el balotaje del domingo con el 54,5% de los votos frente a Jorge Quiroga, había prometido durante su campaña reinsertar a Bolivia en el escenario internacional. El país sudamericano mantenía hasta ahora como principales aliados a Venezuela, Cuba, Nicaragua y Rusia. El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, celebró el triunfo de Paz, señalando que representa «una oportunidad de transformación para ambas naciones» después de «dos décadas de una mala administración».
Un Nuevo Capítulo en las Relaciones Bilaterales
Este restablecimiento de relaciones diplomáticas abre un nuevo capítulo para Bolivia, que busca reposicionarse en el contexto internacional. El acercamiento con Washington podría facilitar acuerdos de cooperación económica e inversiones que ayuden a enfrentar la crisis económica que afecta al país. Paz asumirá formalmente la presidencia el 8 de noviembre, dando inicio a una nueva era en la política exterior boliviana. Información extraída del medio DW.