CTERA y ADOSAC alertan sobre el borrador de la “Ley de Libertad Educativa”, cuestionando privatización y recorte del rol estatal.
La Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA) rechazó el borrador conocido como “Ley de Libertad Educativa”, que busca derogar la Ley de Educación Nacional 26.206 y modificar el financiamiento de la educación pública. La información se extrajo de La Opinión Austral.
Críticas al proyecto y puntos más cuestionados
El gremio docente, liderado por Sonia Alesso y Roberto Baradel, calificó el borrador como “un verdadero ataque al sistema democrático” y alertó que el proyecto pretende transformar la educación en un servicio, en lugar de un derecho social. Entre los puntos más cuestionados destacan:
- Eliminación del Estado como garante principal del financiamiento educativo, reduciéndolo a un rol subsidiario.
- Paso del financiamiento al sistema de vouchers para familias, favoreciendo escuelas privadas.
- Declaración de la educación básica como “servicio esencial”, limitando el derecho a huelga.
- Promoción de educación religiosa confesional en escuelas públicas y homeschooling.
- Supresión del artículo que obliga a destinar al menos el 6% del PBI a educación y limitaciones frente a tratados que mercantilicen la educación.
- Implementación de pruebas estandarizadas y evaluaciones docentes punitivas basadas en meritocracia.
Proyecto privatizador según CTERA
La central docente calificó la iniciativa como “un proyecto conservador” que prioriza la responsabilidad familiar por encima del principio colectivo de socialización y justicia social. Según el gremio, esta ley representa “un nuevo intento de los sectores de la derecha de avanzar en la privatización y destrucción de la Educación Pública” y un retroceso que “pretende llevarnos educativamente al siglo XIX”.
Rechazo y defensa de la educación pública
CTERA reafirmó su compromiso con la educación como derecho social y enfatizó la necesidad de mantener al Estado como garante de financiamiento y regulador del sistema educativo, asegurando igualdad de oportunidades para todas las familias argentinas.
El borrador de la “Ley de Libertad Educativa” enfrenta el rechazo masivo de los gremios docentes, quienes advierten sobre los riesgos de privatización y el debilitamiento de la educación pública en Argentina.




