El Congreso prepara un período de sesiones extraordinarias con un extenso temario impulsado por el Gobierno.
El Gobierno nacional avanza en la convocatoria a sesiones extraordinarias del Congreso, previstas a partir del 10 de diciembre, mientras define el formato, la duración y el temario que encabezará el período legislativo especial. La discusión interna se centra en el Presupuesto 2026 y la reforma laboral, dos iniciativas clave para la administración de Javier Milei. La información fue elaborada a partir de datos aportados por Canal 12 Web, según informó Canal 12 Web.
El Ejecutivo apunta a un decreto inminente
Aunque la decisión política ya está tomada, en la Casa Rosada aún ajustan detalles antes de oficializar el decreto de convocatoria. Fuentes gubernamentales señalaron que el 5 de diciembre figura como una de las fechas tentativas para formalizar el llamado, aunque aún no hay resolución definitiva.
El Ejecutivo aguarda la jura de legisladores —el 28 de noviembre en el Senado y el 3 de diciembre en Diputados— para avanzar con el anuncio, que podría anticiparse incluso antes del 10 de diciembre.
Debates internos sobre la extensión del período
Una de las definiciones pendientes es la duración del período extraordinario. Dentro del oficialismo crece la idea de sesionar entre el 10 y el 31 de diciembre, hacer una pausa en enero y retomar a fines de ese mes o en febrero.
El presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, impulsa un cronograma intenso que incluso podría prolongarse hasta el 28 de febrero, replicando lo ocurrido en la última temporada legislativa.
Desde el bloque libertario aseguran que se buscará asegurar al menos un mes de actividad sostenida: “Lo ideal sería continuar hasta febrero; lo seguro es activar en diciembre, frenar al inicio del año y retomar sobre el final de enero”, expresó un legislador cercano a la conducción.
Presupuesto 2026 y reforma laboral, los ejes del debate
El objetivo central del Gobierno será la sanción del Presupuesto 2026 y el avance en la reforma laboral impulsada por el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger. Este proyecto ya generó tensiones con el sindicalismo y diferencias dentro del sector empresario.
El titular de la UOCRA, Gerardo Martínez, señaló que “no hay consenso” en los puntos centrales. A su vez, el presidente de la UIA, Martín Rappallini, reclamó profundizar limitaciones a los juicios laborales, mientras que otros dirigentes industriales piden preservar un “equilibrio razonable”.
Desde la Casa Rosada respondieron que escucharán sugerencias, pero la decisión final será presidencial: “El Consejo es consultivo; la impronta es del Gobierno”, señalaron fuentes oficiales.
El rol del Consejo de Mayo y el temario ampliado
El 9 de diciembre, el Consejo de Mayo enviará al Congreso el paquete de proyectos incluidos en el Pacto de Mayo, con excepción de los puntos vinculados a la reforma previsional y la coparticipación, que se discutirán más adelante. Entre los aspectos laborales posibles figuran: ultraactividad, relación entre convenios, cargas fiscales, financiamiento sindical, derechos colectivos e individuales, régimen para autónomos y democracia sindical.
Desde distintas provincias también solicitaron incorporar la reforma de la Ley de Glaciares. Para febrero podrían quedar la reforma del Código Penal y la reforma tributaria, dos iniciativas de alto impacto institucional.
Un período clave para el rumbo político y económico
Con un cronograma exigente, un temario cargado y negociaciones abiertas con múltiples sectores, el Gobierno busca asegurar un período extraordinario que le permita ordenar su agenda legislativa y fijar los lineamientos económicos del inicio del ciclo 2026. La intensidad del debate anticipa un escenario político dinámico, en el que el oficialismo intentará consolidar mayorías para aprobar sus reformas estructurales.




