Encontrar agua en un mundo potencialmente habitable que no sea la Tierra es increíblemente emocionante. K2-18b no es una “Tierra 2.0″, ya que es significativamente más pesado y tiene una composición atmosférica diferente. Sin embargo, nos acerca a responder la pregunta fundamental: ¿Es la Tierra única?”.
Quien así de emocionado se expresa es Angelos Tsiaras, director de la investigación de la University College of London (UCL) donde han detectado vapor de agua, por primera vez, en la atmósfera de una supertierra que además cuenta con temperaturas habitables. Se llama K2-18b, que tiene ocho veces la masa de la Tierra, y es ahora el único planeta que orbita una estrella fuera del sistema solar, o “exoplaneta”, del que sabemos que tiene agua y temperaturas que podrían soportar la vida.
El descubrimiento, publicado hoy en Nature Astronomy, es la primera detección atmosférica exitosa de un exoplaneta que orbita en la “zona habitable” de su estrella, a una distancia donde el agua puede existir en forma líquida. Desde el descubrimiento del primer exoplaneta en la década de los 90, los astrónomos han buscado planetas ubicados en la zona habitable de sus estrellas, donde las condiciones puedan conducir a la formación de agua líquida y la proliferación de la vida.
El planeta orbita la fría estrella enana K2-18, que está a unos 110 años luz de la Tierra en la constelación de Leo. Dado el alto nivel de actividad de su estrella enana roja, K2-18b puede ser más hostil que la Tierra y es probable que esté expuesto a más radiación, según aseguran desde la UCL. K2-18b fue descubierto en 2015 y es uno de los cientos de supertierras – planetas con una masa entre la Tierra y Neptuno – encontradas por la nave espacial Kepler de la NASA. Se espera que la misión TESS de la NASA detecte cientos de supertierras en los próximos años.
Más lugares como la Tierra
“Con tantas nuevas supertierras que se espera encontrar en las próximas dos décadas, es probable que este sea el primer descubrimiento de muchos planetas potencialmente habitables”. Esto no solo se debe a que las súper-Tierras como K2-18b son los planetas más comunes en nuestra galaxia, sino también porque las enanas rojas – estrellas más pequeñas que nuestro Sol – son las estrellas más comunes “, ha manifestado Ingo Waldmann miembro del equipo de investigadores de UCL, en un comunicado.
Para este trabajo de investigación se han usado datos del Hubble de la ESA / NASA. La próxima generación de telescopios espaciales, incluido el telescopio espacial James Webb de la NASA / ESA / CSA y la misión ARIEL de la ESA, podrán caracterizar atmósferas con más detalle ya que llevarán instrumentos más avanzados. Se espera que ARIEL se lance en 2028, y observará 1.000 planetas en detalle para obtener una imagen verdaderamente representativa de cómo son.
La profesora Giovanna Tinetti (UCL CSED), coautora de este hallazgo e investigadora principal de ARIEL, dijo: “Nuestro descubrimiento hace que K2-18 b sea uno de los objetivos más interesantes para futuros estudios. Se han detectado más de 4.000 exoplanetas, pero no sabemos mucho sobre su composición y naturaleza. Al observar una gran muestra de planetas, esperamos revelar secretos sobre su química, formación y evolución “.
“Este estudio contribuye a nuestra comprensión de los mundos habitables más allá de nuestro sistema solar y marca una nueva era en la investigación de exoplanetas, crucial para finalmente colocar la Tierra, nuestro único hogar, en la imagen más amplia del cosmos”, añadió el Dr. Tsiaras.