Mientras la comitiva provincial que envió Arcioni, liderada por el ministro de Economía, Oscar Antonena, trataba de colar ante las autoridades nacionales el plan de acción para atender la crisis de Chubut y conseguir así el apoyo del Gobierno Nacional, el titular del Ejecutivo provincial esperaba ansioso, cuál Penélope, el resultado de las gestiones de su equipo.
Según trascendió, poco oxígeno habrían conseguido las huestes de Mariano en la “ville lumiére” a pesar de los grandilocuentes anuncios acerca del plan de medidas que se pretendería encarar. Como reza el dicho popular, “mucho ruido, y pocas nueces”.