El presidente Alberto Fernández afirmó este miércoles en Santiago de Chile que el «capitalismo debe revisarse» luego de la pandemia del coronavirus, estimó que una mayor «unidad regional» hubiera ayudado a enfrentar mejor la crisis actual y señaló al multilateralismo como «el único camino» posible, al hablar en una conferencia magistral organizada por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
En su discurso, el mandatario -quien realiza una vista de Estado de dos días en el país vecino-, consideró que la Covid-19 ha sido una «auténtica tragedia» que «ha dejado en claro la insuficiencia de un sistema, y se llevó vidas y economías enteras».
«Hoy nos estamos fijando quién cayó más o quien cayó menos y no quién creció, y es producto de la pandemia. Uno debe preguntarse cuán sólidas eran esas bases económicas para que un día apareciera un ser imperceptible y lo destruyera todo», expuso el jefe de Estado, en su última jornada de visita a Chile.
Sin embargo, consideró que «la pandemia ofrece una magnífica oportunidad para revisar todas y cada una de estas cosas, porque de esta pandemia no se salvó nadie: ricos y pobres han caído».
Citando al Papa Francisco, el presidente dijo de que «nadie se salva solo» y llamó a «poner en valor una palabra olvidada que es solidaridad, no asistencialismo, ser solidario con el prójimo».
El mandatario argentino hizo especial hincapié en la utilidad del multilateralismo y repitió un concepto que había dicho ayer durante la declaración conjunta con el presidente chileno Sebastián Piñera: la unión de la región hubiera tenido efectos positivos a la hora de gestionar las vacunas contra el coronavirus.
«Me tocó llegar al Gobierno en un momento muy difícil de Argentina en el que todos me recomendaban un alineamiento absoluto a los Estados Unidos y muchos descreían del multilateralismo, creían que había aparecido una nueva forma de nacionalismo que se iba a ir imponiendo en uno y otro lado. Ese modelo se derrumbó en el mismo lugar donde había nacido», afirmó en alusión al fin del gobierno de Donald Trump.
En esa línea recordó los efectos negativos de la Guerra Fría e indicó que es necesario «tomar esa experiencia» para que quede en evidencia que «el multilateralismo es el único camino».
«No estoy hablando de la insuficiencia del capitalismo, estoy hablando de un capitalismo más humanitario. El actual no atiende la importancia de la humanidad y no es bueno. Claramente. Se necesita apostar a la inversión, al trabajo, al desarrollo y no un sistema que se concentra en la explotación financiera», abundó.
En otro orden, Fernández convocó a que Latinoamérica se constituya en «un continente unido para poder enfrentar el desafío que se viene».
Además, destacó el rol de la educación pública, de la universidad gratuita y de la inversión en la ciencia y tecnología en el desarrollo de la región, y del lugar que ocuparon para poder dar respuesta a la pandemia.
Antes del discurso de Fernández, hizo uso de la palabra la titular de la Cepal, Alicia Bárcena, quien recordó las «circunstancias» en las que asumió Fernández: dijo que aquellas «no podían ser más desafiantes» con una «pobreza del 35,5%; un desempleo cerca del 10%; una deuda pública del 90 del PIB, sin precedentes; y una virtual cesación de pagos».
En ese contexto, Bárcena elogió la política de desendeudamiento encarada por el gobierno argentino y puso especial énfasis en ponderar las medidas adoptadas para afrontar la crisis social de la pandemia.
La segunda y última jornada de visita de Fernández al país trasandino se había iniciado por la mañana en una reunión con el exmandatario chileno Ricardo Lagos y concluirá en un encuentro con empresarios en la residencia de la embajada argentina en Santiago.
Además, desde la representación diplomática argentina en Santiago, se explicó que la agenda presidencial contemplaba otro encuentro -pero vía teleconferencia- con inversionistas convocados por el Comité Empresarial Binacional.