«Es muy difícil plantear cuáles van a ser las definiciones de 2023 cuando ni siquiera te permiten tener las reglas del juego definidas», expresó la abogada y actual diputada nacional por Chubut Ana Clara Romero en diálogo con El Extremo Sur. Romero -quien se perfila como la principal candidata opositora a la intendencia de Comodoro Rivadavia- detalló que presentaron más de 100 proyectos «para fortalecer la educación, el desarrollo energético y las obras públicas». Sobre la iniciativa de eliminar las PASO, aseguró que es «una cuestión de miedo». «Tienen un gobierno que está haciendo agua por todos lados, y en todos los estamentos. A nivel local, esta gestión no tiene nada para mostrar», afirmó. Sobre Chubut, dijo: «Que estemos subvencionando el precio del petróleo a todo el país sin lograr un mecanismo de compensación de esas pérdidas es escandaloso». En cuanto a las obras nacionales para Chubut, describió: «Hay un listado de obras presupuestadas en valores que equivalen al 10% de la obra. Van a clavar el cartel y se va a acabar la plata. Son inconsistencias, y tomadas de pelo o burlas a la gente. Somos la provincia número 19 en prioridad de adjudicación de obras y gastos».
Criticó el proyecto del Presupuesto 2023, que no fue acompañado por Juntos por el Cambio por carecer de previsiones realistas sobre la economía del próximo año: «las previsiones del dólar, de la inflación en general, hacen que todo el presupuesto en sí mismo sea poco creíble», sostuvo.
«Tenemos que dejar de pensar que estamos condenados al éxito y entender que hay que arremangarse, trabajar fuerte, ser serios, generar marcos de seguridad jurídica para que vengan inversiones, dejar de lado los anuncios y las chabacanerías, acá nadie va a descubrir la pólvora», comentó sobre el futuro productivo de Chubut.
¿Cuáles son, a tu juicio, los proyectos de mayor impacto que venís desarrollando o acompañando desde el inicio de tu trabajo legislativo?
En principio, los proyectos de Educación. Acompañé el proyecto de esencialidad de Alejandro Finocchiario, para que la educación sea declarada y decretada servicio esencial estratégico. También acompañamos el de Maximiliano Ferraro, de la importancia de la evaluación para generar políticas a partir de datos reales. El tercero, que es de mi autoría, propone un auxilio económico del Estado Nacional para las jurisdicciones cuyas clases hayan sido interrumpidas por más de 90 días. También también estamos acompañando aquellos que tienen que ver con el género. En la próxima sesión vamos a buscar que se dictamine la inclusión de Belem do Pará en los tratados que tienen rango constitucional para nuestro país. Además, hicimos un proyecto acompañando apacientes oncológicas, para que las obras sociales cubran el costo de la reconstrucción de la mama colateral. En total, llevamos unos 120 proyectos, entre los presentados y los acompañados.
Estás llevando adelante varios proyectos relacionados a la situación energética de la provincia.
Respecto de la energía, venimos haciendo y proponiendo el reconocimiento de las diferencias que estamos perdiendo como provincia por el precio del barril de petróleo interno, que llegó a estar a la mitad del valor internacional. Eso implica pérdidas enormes en regalías en una provincia que en la que nos falta todo, que no nos sobra nada. Que estemos subvencionando el precio del petróleo a todo el país sin lograr un mecanismo de compensación de esas pérdidas es escandaloso. En esa misma línea, junto con Matías Tacetta planteamos el proyecto dólar petróleo, en algún momento parecía que iba a tener algún tipo de acompañamiento, finalmente no se dio. Estamos insistiendo en la Comisión de Energía para el proyecto de Gustavo Menna del hidrógeno verde, teniendo en cuenta que es legislación que ya ha vencido. Pensando siempre en generar incentivos a la industria, generar certezas, seguridad jurídica para que vengan las inversiones. Lo mismo con el proyecto de trazabilidad de la industria pesquera, buscando seguridad alimentaria, poder insertarnos en mercados internacionales, en definitiva, potenciar la actividad. También presenté, a principio de año, el proyecto de emergencia hídrica, teniendo en cuenta la situación grave que atravesamos históricamente los chubutenses, particularmente la situación de la Cuenca del Senguer.
¿Hay posibilidades de diálogo serio entre las distintas fuerzas que integran la Cámara baja?
Hay algunos temas en los que sí, otros que no. En las comisiones a veces se logra mejor vínculo y diálogo de lo que luce en las sesiones. Se han trabajado cuestiones en consenso, como el tema de la pesca, la ley de VIH, la de economía del conocimiento, la de nanotecnología. Tenemos diferencias en algunos puntos del articulado que van en contra de la premisa de Juntos por el Cambio de no generar nuevos organismos e impuestos y más gastos de burocracia. Hay proyectos en los que podemos ponernos de acuerdo. Se vota en disidencia en particular respecto a algunos artículos, pero en lo grueso logramos un criterio común.
Desde Juntos por el Cambio decidieron no acompañar el Presupuesto 2023. ¿Cuáles son los motivos?
No lo acompañamos porque tenía recortes importantes en Educación, Niñez y Salud. La educación particularmente es un área que viene siendo muy golpeada por la pandemia, que ha sido recortada, se impidió la presencialidad, hubo dificultades para millones de chicos en todo el país para conectarse. Que en 2022 estuvieran proponiendo y aprobando un presupuesto de esas características para nosotros era imposible de acompañar. Por otro lado, vimos cuestiones o falencias que entendemos gruesas, más técnicas o de variables más económicas como prever una inflación del 60% cuando recién ahora se están viendo las consecuencias de la segmentación de energía, eso no ha impactado todavía en la sociedad y va a impactar directamente en la inflación. El esquema que presentan aparece de muy difícil implementación y muy enganchados y de manera muy finita con lo que es la construcción del gasoducto Kirchner. Están haciendo una planificación que implica una situación con complejidades para concretarse, como el hecho de que el gasoducto debiera estar operativo para el 20 de junio. También algunas previsiones del dólar, de la inflación en general, que hacen que todo el presupuesto en sí mismo sea poco creíble.
¿Han trabajado en otras vías legislativas para paliar la situación económica que prevén con este presupuesto?
Se logró una cláusula gatillo en el caso de que la inflación no sea la que ellos prevén. Cualquier ampliación tendría que pasar por el Congreso, sobre todo teniendo en cuenta que va a ser un año electoral donde va a haber mucha desesperación por implementar un «plan platita» como hicieron en el 2021. Nosotros apuntamos a que haya el mayor control posible respecto de los recursos.
¿También fue rechazado por el desglose presupuestario para la provincia?
Respecto de las obras de Chubut, hay un listado de obras presupuestadas en valores que equivalen al 10% de la obra. Van a clavar el cartel y se va a acabar la plata. Esas cuestiones son inconsistencias, y en algunos casos tomadas de pelo o burlas a la gente.
¿A qué crees que responden las propuestas para eliminar la instancia de las PASO?
Yo estoy convencida de que es una cuestión de miedo. Tienen un gobierno que está haciendo agua por todos lados, y en todos los estamentos. A nivel nacional, va a al frente de la debacle con una inflación que no para, el permanente recambio de funcionarios, con los aparentes o sobreactuados supuestos desacuerdos internos, con una vicepresidenta que puso un presidente y ahora pretende desconocerlo. Somos la provincia número 19 en prioridad en adjudicación de obras y gastos. Significa que estamos en las últimas a pesar de ser una provincia que genera divisas por ser la cuarta exportadora, que está subsidiando como provincia productora el combustible para todo el país, de ser una provincia que genera regalías. Nosotros no somos tenidos en cuenta.
¿Se puede trazar un análisis similar a nivel local?
Lo mismo a nivel local. Es en la diaria donde se ve que no hay obras grandes, no se terminan, y hay anuncios pero no concreciones. En el gobierno de Macri, en Comodoro se terminó el Puerto, se hizo el tramo de la ruta 26, se concretó el aeropuerto así como planes de vivienda donde hoy viven más de 41 familias y el centro comunitario del San Cayetano. Esta gestión no tiene nada para mostrar en Comodoro Rivadavia, no está ni terminado el reservorio, y es la única obra que hace ruido de muy poco y que representa un 2% en valor de la cantidad de recursos que necesitamos para las obras necesarias para evitar que nos sigamos inundando. La prueba está en que el 30 de septiembre de 2022 llovió un tercio de lo que llovió en 2017 y a la gente se le inundaron las calles, las casas, siguieron perdiendo pertenencias. Esa es una realidad que hoy no pueden tapar con plata a pesar de que lo intenten. La inflación le come el bolsillo todos los días a los argentinos, los chubutenses y los comodorenses por igual, no pueden poner la cara ni dar una explicación al respecto por más que maquillen, por más que quieran vender que esto es Disney.
¿Ves cierto hastío por parte del electorado en provincias como la nuestra, que históricamente han sido gobernadas por el peronismo?
La gente se está dando cuenta que hace 20 años prometen bonanza, cosas que no cumplen, y seguimos teniendo los mismos problemas históricos: la falta de agua, la trama vial detonada, ausencia de planificación y de solución de los problemas básicos. En el 95′ se cortó la ruta 3 y quedamos prácticamente incomunicados. Sabemos que nuestro cerro se mueve, la situación amerita un estudio y obras de infraestructura, no ha habido solución de fondo a nada de eso. El acueducto está igual que en 2017. La gente se da cuenta, me parece que no hay que subestimarlos. Pasó puntualmente en la inundación, yo no salí a pegarle al gobierno municipal, que es el responsable, que no hizo nada y finalmente no gestionó las obras cuando debía. Salieron al otro día a querer generar obras y presupuesto, porque realmente el enojo de los juicios que los propios comodorenses expresaban en redes cuando los acompañamos era contundente, no hacía falta que ningún político lo decodificara.
Considerando la amplia gama de recursos que tiene la provincia y la situación de crisis actual, ¿es necesaria una manera diferente de gestionarlos?
Creo que hace falta un cambio cultural. Referentes oficialistas se vanaglorian de nuestras potencialidades, de nuestra proyección, de nuestras posibilidades, después de 20 años de un gobierno, de un estilo de gobernar, sin que esas potencialidades hayan podido convertirse en actos. En realidad, son un gran fracaso. Cuando escucho «esta es una oportunidad», pienso que no es una oportunidad, es la última chance que tenemos. Hay que asumirlo. Necesitamos gestionar nuestra Cuenca, tratar de mantener y de frenar el declive de nuestra producción, a través de tecnologías, esfuerzo e inversión. Tenemos que ir desarrollando esta transición energética, que tiene que ver con generar fuentes de energía a partir de las energías renovables, puntualmente de la eólica. Somos privilegiados, nuestros vientos son los mejores de toda América. Bahía Blanca, por ejemplo, tiene un factor de producción 38, y nosotros un 62. Es una barbaridad. Somos la provincia con más generadores instalados en todo el país. También tenemos que fomentar eso, no es barato, hay que aplicarle recursos, hay que pensar cómo vamos a transportar esa energía que queremos reducir. Había un Parque Eólico licitado y adjudicado en Pampa del Castillo, de más de mil millones de dólares, y no se pudo avanzar porque no teníamos la estación transformadora Comodoro-Oeste. Se cayó esa licitación porque no había forma de garantizar que lo que se produjera se iba a poder transportar. Tenemos que dejar de pensar que estamos condenados al éxito y entender que hay que arremangarse, trabajar fuerte, ser serios, generar marcos de seguridad jurídica para que vengan inversiones, dejar de lado los anuncios y las chabacanerías, acá nadie va a descubrir la pólvora. Los caminos están trazados, hay mucha gente que viene trabajando seria y silenciosamente en ese sentido.
¿Hay alguna proyección política definida para 2023? ¿O es un momento de indefiniciones?
Es muy difícil plantear cuáles van a ser las definiciones cuando ni siquiera te permiten tener las reglas del juego definidas. Ni siquiera sabemos en qué cancha vamos a jugar. No dejo de decirlo, acá hubo un candidato comodorense a gobernador que dijo que jugaba en cualquier cancha y ahora están llorando por los rincones para ver cómo acomodan reglas del juego y marcan las líneas. Hay vocación de participar, por supuesto. Juntos por el Cambio va a tener candidatos en todas las provincias y localidades, y si vamos a jugar en cualquier cancha es porque el kirchnerismo está emperrado en complicarnos la situación, en embarrar el escenario para tratar de mermar nuestras posibilidades.
¿Se pueden esperar grandes cambios en los liderazgos para el próximo año?
Ya vieron en 2021 que hay un cambio de época, donde las personas, las caras, somos absolutamente circunstanciales. La gente está cansada de que le mientan, que prometan cosas que no cumplen. Han tenido 20 años para mostrar qué pueden hacer y qué saben hacer. A mi modo de ver, la experiencia nos ha empobrecido, en el medio hemos perdido recursos y oportunidades reales. Hoy es el momento de darle la oportunidad a otro espacio que muestre que también puede gestionar y llevar adelante esta cruzada que tiene que ver con dar vuelta la provincia y con darle a Comodoro las posibilidades y proyecciones a las que tiene derecho.